Me ha resultado muy lento y los personajes parecen estereotipos de pelicula romántica americana de sobremesa.
El planteamiento es original hasta cierto punto: Ariadna empieza a tener lapsus de memoria al cumplir los 16. Su madre, que se huele la tostada, decide mandarla a pasar el verano con su abuelo paterno al circo donde trabaja. Allí descubre que es una elfa y que el circo en realidad sirve como hogar para todo tipo criaturas mágicas. Conoce a Antoine un chico que, como en el 80% de las novelas románticas, al principio rechaza pero luego cae rendida a sus pies…
A pesar de que el tema podría haber dado para un libro muy interesante a mi me ha parecido bastante flojo, con acciones típicas que dan como resultado giros totalmente esperados.
La forma de hablar de los personajes hace que los veas poco creíbles, que no te involucres en la historia y que pases las páginas esperando un cambio que no llega.
El final, sin hacer mucho spolier, me ha parecido un poco ridículo (aunque yo no soy precisamente una romántica empedernida) e incluso podría decirse que ha sido más que inspirado por ‘The great showman’.

Nuncanoche es el primero de tres libros que nos contarán el nacimiento, la vida y la muerte, de la mejor y más conocida asesina de todos los tiempos.

Mia Corvere ha pasado de rica heredera nacida en la Médula a fugitiva en una sola nuncanoche.

Su padre ha sido ajusticiado en la plaza pública, para divertimento de los espectadores, acusado de traición. Su madre y su hermano pequeño han sido enviados a pudrirse en una celda en la Piedra Filosofal.

En su huida, Mia descubre a un nuevo amigo hecho de sombras, Don Majo, que la acompañará en sus aventuras y desventuras, aconsejándola y obsequiándola con frases sarcásticas y comentarios ingeniosos.

Pero si alguien cambia el destino de Mia ese será Mercurio, su shahiid, su maestro en el arte del asesinato.

Porque lo que más ansía Mia, más que su propia vida, es vengarse. Vengarse de los tres hombres responsables de la muerte de su padre: Remo, el justicus de la legión Luminatii; Duomo, el Gran Cardenal de la Iglesia de la Luz; y, por supuesto, Scaeva, el consul del senado Itreyano.

No es un trabajo sencillo. Necesitará dominar distintas artes a la perfección para poder llevar a cabo su plan, así que su destino está claro: La Iglesia Roja, una academia para asesinos que rinden culto a Niah, la diosa de la muerte, el Abismo.

Pero el viaje, como ya he dicho antes, no será un camino de rosas. Encontrar la Iglesia Roja no será fácil pero lo peor estará dentro: crueldad, torturas, enemigos en todas las esquinas, traición y, en definitiva, muerte. Si consigue superar todas las pruebas será ungida como Hoja, si no, muy probablemente muera.

Allí dentro, sin embargo, encontrará cosas inesperadas como la amistad, el ¿amor? y la piedad, mientras descubre más sobre sí misma y su poder para controlar las sombras. Porque Mia es una tenebra, aunque ni siquiera ella sabe muy bien qué significa eso.

En este libro recorremos los inicios de la que llegará a convertirse en la mejor y más famosa asesina de todos los tiempos.

VALORACIÓN

Reconozco que, al principio, la historia se me hizo algo pesada. El autor nos bombardea con mucha información porque nos metemos de lleno en un mundo totalmente distinto en el que, para empezar,  los soles (en plural) sólo se ponen cada unos cuantos años. De ahí que al periodo en el que la gente duerme se le llame nuncanoche.

La sociedad está claramente inspirada en la de la antigua Roma pero tiene sus propia mitología, sus propias lenguas, su propia historia… Así que hay mucho que contar en poco tiempo. ¿La solución? Notas a pie de página en las que el narrador, que no se llega a identificar (aunque creo que es Don Majo), rompe el ritmo y el tono de la historia para contarnos con cinismo e ironía los pormenores de la República Itreyana.

La mayoría de los personajes son femeninos y creo que la historia rompe con muchos de los estereotipos que solemos ver en las novelas de fantasía (aunque es verdad que esa tendencia se está corrigiendo en los últimos años).

También hay que destacar las escenas de sexo. Aunque ya sé que es algo que no interesa para nada, que no aporta nada a la historia, que pasaréis por encima sin apenas ojearlo, porque vosotr@s jamás leéis S. E. X. O., ¡por favor!

Ya.

El caso es que hay dos escenas de sexo completamente explícitas y que se alejan bastante de las típicas escenas de: se besaron y… al día siguiente aparecen envueltos en sabanas. Son sólo dos, pero ocupan unas cuantas páginas cada una. Os hacéis una idea.

Pero lo que más me ha dejado alucinada son los giros inesperados (inesperadísimos) del final. El autor juega contigo, al igual que los personajes juegan con Mia, y acabas deseando que algo de la magya que usan pueda cambiar eso que acabas de leer y que no os puedo contar pero madremíadelamorhermosoporquéeee.

Es un libro redondo. Nada queda al azar y ninguno de los hechos son aleatorios. Y eso lo comprobamos en las últimas páginas, llenas de acción y que sólo puedes devorar sin importar la hora que sea y la falta de sueño para acabar pidiendo más.

Lo bueno es que en octubre sale la segunda parte. ¡Gracias a Niah!

¿Lo habéis leído? Sí es así: Siento vuestro dolor, estoy aquí sufriéndolo también, ya queda menos para octubre.

En este volúmen se reúnen 8 libros que contienen todos los cuentos (¿a que no os lo esperábais?) de Sergio Ramírez ordenados cronológicamente:

Cuentos (1963)

Nuevos cuentos (1969)

De tropeles y tropelías (1972)

Charles Atlas también muere (1976)

Clave de sol (1992)

Catalina y Catalina (2001)

El reino animal (2006)

Flores oscuras (2013)

En sus relatos nos habla sobre la vida y sobre las pequeñas acciones que la componen siempre con Nicaragua como telón de fondo.

A veces nos muestra con cariño la vida sencilla de los pueblos en contraposición con la de la ciudad, de la que nos suele dar una imagen nada halagüeña.

Son historias oscuras, llenas de crítica tanto social como política que, desgraciadamente, no pasarán de moda nunca (Imposible leerse De tropeles y tropelías sin pensar en unos cuantos políticos de nuestros días).

Todo esto lo hace con un lenguaje sencillo, narrando los hechos, por muy macabros que sean, de una manera directa y casi insensible, lo que no evita que el lector juzgue las acciones de los personajes. 

Las descripciones nos transportan, a través del tiempo algunas veces, hasta los paisajes Nicaragüenses y hasta las vidas de estas personas aparentemente corrientes pero cuyas acciones, nos obligan a mirarnos en un espejo y a sacar nuestras propias moralejas.

«Pasaba ya la medianoche y afuera en el campo de maíz oía a los vientos soplar sobre las tierras desnudas, conociendo el nombre de cada uno de ellos como quien identifica a los pájaros por sus cantos aun en lo oscuro del amanecer»

Nicaragua es blanca, Sergio Ramírez
 

Son relatos cortos que destilan la esencia de una gran historia, muchos de ellos en apenas un par de páginas.

(Valoración en el blog)

¿Se puede hablar de crítica social, de lucha de clases, y de vampiros manchegos en una misma novela? Al parecer sí. Y la combinación es desternillante.

La acción transcurre en Cañete del Retamal, un pueblo toledano de lo más típico: Con su médico, su cura, su cacique, sus dos bares y su vampiro transilvano.

Ceferino Morales, dueño y señor de todo el pueblo, obeso, avaricioso y sin escrúpulos, se ve envuelto en un apocalipsis vampírico al querer deshacerse del cadáver del abuelo de su capataz.  Cuando el cuerpo del anciano desaparece y empiezan a sucederse las muertes, todos sus empleados, rumanos sin contrato (¡faltaría más!), empiezan a abandonar la finca espantados ante lo que es obvio.

Será Lucio, el sobrino pequeño de Ceferino, fan de lo paranormal y con una inteligencia muy superior a la del resto de sus familiares, quien les explicará qué los está cazando y cómo pueden defenderse.

Con un humor sardónico y derribando en muchas ocasiones la cuarta pared para dirigirse directamente a nosotros, el autor nos muestra una guerra entre unos seres sedientos de poder y venganza… y los vampiros.

Porque en este libro también vemos lo peor de la naturaleza humana, reunida buena parte de ella en un coto de caza privado dónde se celebra una montería. En pleno ataque vampírico. ¿Qué podría salir mal?

En la novela hay sangre, por supuesto, aunque se reserva casi toda para el final y yo  (fan de The Walking Dead) no la calificaría como gore. Es verdad que hay algún que otro desmembramiento pero ya tenemos el estómago acostumbrado, ¿verdad? *risa maléfica*

Los vampiros son la excusa (y la metáfora) perfecta para criticar el clasismo y los abusos de poder, a la vez que te echas unas risas con la posibilidad de un grupo de beatas vampiras.

Sangre de Bellota es la respuesta a la pregunta: ¿Qué pasaría si Delibes se hubiese tomado unas cañas con Alex de la Iglesia?

——

Me ha sorprendido mucho esta novela. He de reconocer que al leer la sinopsis (o más bien al leer la palabra vampiro) me espera otra cosa. La culpa la tiene Crepúsculo y todo lo que le ha hecho a las novelas de vampiros. ¡Maldito gusiluz con gomina!

Se lee rápido y, en este caso, es algo bueno. La historia te engancha y, aunque la mayoría son detestables, los personajes están bien construidos y son creíbles. El autor juega con los estereotipos sin llegar a crear personajes estereotipados.

La única pega que le pongo es que no veo muy desarrollados los personajes femeninos. La agente Ramírez me parece un personaje muy interesante al que se le podría haber sacado mucho partido y que se queda en nada.

El final ha sido inesperado, en cierta manera, y bastante abrupto para mi gusto pero te deja un buen sabor (a sangre) de boca.

Es un ejemplo de novela que merecería más reconocimiento y que me hace preguntarme porqué en su portada no aparece la pegatina de Best seller y en otras que no valen ni para envolver pescado sí.

Os la recomiendo para pasar un rato divertido, sobretodo si disfrutáis como yo de las películas de Alex de la Iglesia.

Os habla una fan de Jason Statham. No de todas sus películas porque reconozcamos que algunas son una basura muy grande (y ya sé que muchos sustituiríais ese ‘algunas’ por un ‘todas’ en mayúsculas). Os habla una persona que se ha visto la saga de Transporter unas mil veces, alguien que seguramente si la viese ahora le sacaría unas cuantas pegas más que la primera vez que la vio.

Digo esto porque este libro es, en realidad, una película de acción Hollywoodiense de 90 minutos. Una mala. Una llena de frases trilladas en la que el actor es el típico militar americano con una vida típica americana: atleta superestrella en el instituto, beca de deportes para la universidad, ingresa en el ejército y está presente en todos los conflictos armados que se te puedan ocurrir.

Como novia del héroe tenemos una científica muy inteligente, dato que sabemos porque su novio militar no entiende una palabra de lo que dice y no se corta en decirlo porque él tiene que ser fuerte, valiente, y tonto, al parecer. También  está muy buena, dato que sabemos porque la describen como una modelo.

Vamos que si hay algún o alguna militar o científico en la sala estarán encantados…

He de reconocer, antes de que sigáis leyendo, que no me he leído la primera ni la segunda parte y es muy probable que si votrotras sí lo habéis hecho tengáis una opinión muy distinta. Si no es así, si os habéis topado con este libro pensando que era auto-conclusivo o la primera parte de una saga, como me ha pasado a mí, os recomiendo que leáis primero los libros anteriores. No es uno de eso libros que te puedes leer de forma independiente porque te hacen un resumen cada diez páginas (cosa que odio, por otra parte, cuando sí he leído los anteriores).

La premisa es muy buena y las primeras páginas me dejaron muy buen sabor de boca: Un grupo de adolescentes desaparece de su instituto y aparecen en medio de un lago sin saber qué narices ha pasado. Todos ellos hijos de personas importantes, estudiantes del típico colegio pijo inglés. Se dan cuenta de que las prendas que llevaban encima que no fuesen orgánicas (botones, hebillas, cremalleras, etc.) han desaparecido. El primer habitante de ese lugar que se encuentran les dice algo increíble: Están en en Infierno.

Pero a partir de ahí la cosa baja de nivel mucho.

Está lleno de tramas distintas que deberían darle dinamismo y hacerlo entretenido pero sólo consiguen hacer la historia lenta.

La totalidad del libro se puede resumir en: Grupo de militares y científicos cruzan al otro lado (por tercera vez) para impedir que los moradores del Infierno sigan llegando a la Tierra para devorarnos.

Los personajes femeninos de este libro se podrían eliminar por completo porque no aportan nada. En absoluto. O podrían sustituirse por el típico personaje que tanto le gusta (o le ha gustado, quiero pensar que está cambiando algo) a Hollywood de la mujer, rubia a ser posible, que grita.

Da igual que seas una científica a cargo del MAAC, que pertenezcas al gobierno, al FBI o al Círculo de Lectores. Tus compañeros hombres sabrán reaccionar a la situación surrealista de encontrarse en el Infierno. Tú llorarás porque se te ve el sujetador.

No tengo ni idea de lo que haría yo en esa situación. Probablemente también lloraría y me quedaría en posición fetal hasta que me viniese a devorar o violar un Vagabundo. Pero creo que si al autor le ha dado la imaginación para crear un universo alternativo al que se teletransportan las personas malas después de morir, también podría haber creado un personaje femenino NORMAL. Ya no digo una Wonder Woman, pero alguien que mantenga la calma y razone (y aparezca en escena más de medio minuto), ¡por favor!

Y hablando de violaciones… La palabra violar o violación se repite como 800 mil veces. Y no es que vaya a ser tan cándida de pensar que si el infierno se abriese no íbamos a ser nosotras las peor paradas, pero es que llega a ser ridículo. Imaginaos alguien diciendo todo el rato algo así como: “¡Eh, chicos, somos malos y por eso vamos a matar y violar!”. Bueno pues eso es lo que pasa en este libro.

Las mujeres se dividen en dos: guapas y potencialmente ‘violables’ o de más de cincuenta y que no se maquillan. A parte del aspecto físico o de que sean listas porque hacen un discurso de medio segundo con un montón de palabras complicadas su personalidad es inexistente y no va más allá de la función decorativa o (¡peor!) de un pobre intento de querer ser paritario poniendo un grupo de mujeres totalmente grises y anodinas en la historia como quien tira caramelos.

Pero no penséis que los personajes masculinos se libran: Son todos estereotipos  vacíos. Por poner un ejemplo: El hermano de John, Kyle, es un borracho fracasado que perdió su oportunidad en la vida por una lesión deportiva que le impidió seguir los pasos de su hermano mayor, al que le guarda rencor por tema de herencias, y que tiene en esta aventura su oportunidad de redimirse. Por veinte puntos: Títulos de películas en las que aparezca esta trama…

En su defensa diré que se lee rápido. Casi todo son diálogos. Diálogos pobres que apenas aportan información nueva y sólo consiguen dar aún más la impresión de que estás leyendo el guión de una película, eso sí.

Al principio decía que soy fan de Jason Statham para que aquellas y aquellos a quienes os gusta este tipo de literatura no os llevéis a error. Me gustan los libros apocalípticos con militares, disparos y explosiones, es sólo que este no me ha parecido bueno.