FÓRMULA SAMANTHA. Samantha Vallejo-Najera.

En FÓRMULA SAMANTHA, rompe los estereotipos y nos hace partícipes del contenido de los tarros de su vida diaria. A pie de calle Samantha, es una persona de carácter abierto, dicharachero y lleno de ternura, que muy inteligentemente administra sus conocimientos culinarios (trabajo) con su función de madre, en ese aspecto también a catado el amargo sabor de la injusticia social, tiene un “hijo especial” que llena sus días de sonrisas y un amor infinito.
El texto contiene una gran variedad de anécdotas y curiosidades personales, recetas de cocina que va detallando paso a paso y nos confiesa cuáles son sus ingredientes favoritos para condimentar su vida y ser feliz.
Su filosofía diaria es la constancia y el esfuerzo, y “lo practica igual que lo predica”.
Muchos la conocemos como la “Chef dura”, que semana tras semana se emite en TV-1, juntos a dos compañeros de consumado prestigio, el trío de chefs manejan sabrosamente un programa gastronómico que otorga la afamada chaquetilla blanca cada temporada.
FÓRMULA SAMANTHA, nos encontraremos una lectura fresca, divertida y dinámica, que nos hará pasar un buen rato y hasta puede, que pillemos al dedillo alguno de los platos que de manera apetitosa nos detalla.
Aviso:: Mientras lees asegúrate de no tener los fogones encendidos.

Absorto en los intereses propios de sus quince años recién cumplidos, deportes y chicas, Elijah Golsdstein disfruta con la compañía de Poxl West, profesor en un colegio privado de Cambridge, del que su abuelo era decano.

Tras la muerte de su abuelo, Poxl West, pasa a formar parte de la vida del joven, ganando la categoría de tío, no por sangre, pero sí por la dedicación y cariño que muestra por una familia que suple la que él no llegó crear nunca.

Los relatos que Poxl le cuenta sobre su participación en la Segunda Guerra Mundial, forman parte de los recuerdos de la infancia de Elijah. Escuchadas durante años, cobran fuerza cuando Poxl decide plasmarlas en papel y darles forma de libro.

Rellenando páginas, narra su infancia y juventud en Leitmeritz, una ciudad pequeña al norte de Praga, donde vive con sus padres disfrutando de una vida cómoda y con un nivel económico elevado, gracias a la fábrica de cuero propiedad de su familia.

En marzo de 1938 acosado por su condición de judío y ante el inicio de la guerra con entrada de Hitler en Austria, la familia de Poxl decide enviar a su único hijo a Rotterdam. Allí inicia una vida más compleja de la esperada, al fallarle el contacto que su padre había concertado para que le protegiese y ayudase en la nueva ciudad. Solo, y sin nadie a quien recurrir, el joven debe buscar un empleo e iniciar una existencia lejos de la protección de los suyos.

Allí conocerá a Françoise, una prostituta con la que inicia una complicada relación. Gracias a ella descubre un mundo del que nada sabía.

Confuso con sus sentimientos Foxl abandona la vida creada y se aleja de sus miedos, en lugar de enfrentarlos, dirigiendo su destino a la ciudad de Londres.

En aquel lugar, vivirá la parte más dura de una guerra que se cierne sobre la población civil con dureza, en compañía de sus primas Niny y Johana.

Semanas y meses en los que intenta aportar su ayuda para frenar una guerra, que les cambia y condiciona a todos.

Conocer a Glynnis, una enfermera, le devolverá la capacidad de amar. Pero ni sus sentimientos hacia la joven, ni hacia sus primas, frenan sus deseos de ingresar en las fuerzas aéreas para combatir en una guerra, que destruye todo a su paso.

Un nuevo abandono, una nueva huída que condicionará su presente y su futuro.

La publicación de estas memorias y su rápido éxito en ventas y en críticas, hace que el orgullo de Elijah por su tío no deje de aumentar. A pesar de haber leído el manuscrito, incluso recrear mentalmente parte de las escenas descritas por el propio Poxl; Elijah no pude dejar de sentir una gran emoción al tener entre sus manos un ejemplar. Sin apenas dormir, devora las hojas y la vida de una persona tan querida y admirada por él.

Alcanzar la notoriedad, de forma rápida e inesperada por la publicación de sus memorias, lleva a Poxl a pasar un tiempo sin ver a Elijah. Los compromisos adquiridos con la editorial en la promoción de su obra, le llevan a mantenerse distante de la familia Elijah, creando una sensación de vacío en el corazón del joven.

Figurar de forma constante en los medios de comunicación y en publicaciones dedicadas a la crítica literaria, lleva a Poxl a colocarse en una posición en la que mucha gente siente intriga por el personaje, lo que lleva a que varios periodistas investiguen sobre el pasado del autor.

Estas investigaciones conducen a descubrir un pasado de Poxl que sorprende a quienes le conocen y ponen en duda las palabras escritas en un libro que Elijah venera.

La historia parte con la narración de Elijah, él hace la presentación de los personajes principales, habla de su tío y del libro que acaba de publicar, sin llegar a calar en ninguno más que las líneas precisas.

A partir de esa escena la narración se va intercalando entre los sentimientos y sensaciones del muchacho y la vida, contada en primera persona de las memorias de Poxl.

Los saltos entre ambas están bien definidos y no es difícil seguir la historia, ni los momentos narrados. La parte más cautivadora es la planteada sobre la vida de Poxl y su experiencia en la Segunda Guerra Mundial, un momento histórico tocado en muchas novelas, pero al que siempre se le puede dar una nueva visión.

La sensación que produce esta obra es que Poxl, el personaje principal pasa por su propia vida como un mero espectador. Proporciona datos, fechas, lugares y momentos; manteniendo la integridad del momento, donde los sentimientos descansaban en los bolsillos del uniforme, no olvidemos que la valentía y el arrojo brillaban con los galones. Quizás el autor ha querido que así sea, mostrando un personaje incapaz de exteriorizar con pasión su vida, esto hace la lectura más intrépida y expectante a la búsqueda del momento crucial en la vida de Poxl.

LAS SIETE HERMANAS – LA HISTORIA DE MAIA (I) -, Lucinda Riley   (Reseña)

Cada una de las siete hermanas procedía de diferentes puntos internacionales, se sabían adoptadas e hijas de un misterioso millonario del qué pocas cosas sabían, Pa Salt, como así le llamaban, resulto ser un hombre de lo más misterioso, aunque tierno y cariñoso con sus princesas.   Él, había preparado para ellas un enclave magnifico situado en Atlantis (Suiza), una isla preciosa de grandes extensiones, con las instalaciones más modernas del momento y todas las comodidades vida metropolitana. También vivía allí Marina, fiel asistente de la casa qué contaba con la total confianza de Pa Salt.

Pa Salt, les asigno a cada una de ellas, el nombre de una estrella que forma parte del cúmulo abierto de las Pléyades en la constelación de Tauro (información extraída de la Wikipedia). Ally, Star, Cece, Tiggy, Electra y Mérope, eran los diminutivos que les fue poniendo la propia Maia, conforme fueron llegando. Llegar la primera y ser la mayor, daba ese privilegio.

La repentina muerte de Pa Salt, las reunió de nuevo; cada una de ellas tenía su vida más o menos organizada y aunque mantenían un excelente contacto eran independientes, excepto Maia, que vivía asiduamente en Atlantis y que casualmente se encontraba en Londres aquellos días; Maia tenía por delante la difícil tarea de comunicarle la fatídica noticia al resto de sus hermanas, la recomendación era clara, “todas debían volver a casa lo antes posible”.

Marina, siempre leal a la voluntad de Pa Salt, cumplió e hizo cumplir meticulosamente todas las indicaciones del cabeza de familia; reunir a todas las hijas no fue tarea sencilla, pero tampoco imposible, cada una llegó tan pronto pudo y ninguna a tiempo, Pa Salt, ya descansaba donde él había elegido.

Cada una de ellas encontraría en su habitación una carta personalizada a modo de despedida, acompañada de una cita y las coordenadas exactas que les indicaba su procedencia natal.

Una vez estuvieron al corriente de la situación legal y financiera del legado, fueron abandonando la isla para retomar sus vidas con la firme promesa de seguir en contacto y mantener el vínculo de hermanas, aun sabiendo que genéticamente nada las unía y que todas compartían el apellido “D´Aplièse”.

Ya en soledad, Maia, había descifrado también su cita “No permitas que el miedo decida tu destino” y unas coordenadas que señalaban hacia Rio de Janeiro, Brasil; además de un pequeño azulejo triangular con una anotación ilegible.  ¿Qué hacer ante aquella información de Pa Salt? ¿Debería rebuscar sus raíces? 

La inesperada llamada de Zed anunciando su visita, la empuja a tomar una decisión tan rápida como vacilante. Maia y Zed, habían zanjado muchos años tras una relación y ahora no tenía sentido reencontrarse; así pues, tomó la opción más educada, irse y no dar opción al encuentro; al fin y al cabo, la presencia de Zed no le agradaba y tampoco era de su afecto, “lo pasado, pasado está”.

Sin las ideas demasiado claras y sin más intención que seguir las pautas marcadas por su padre en forma de huida turística, Maia, viaja a Rio de Janeiro, Brasil. Nadie sabía dónde estaba, allí nadie la encontrara y quizás encuentre su punto de partida en la vida. Su trabajo como traductora le permitía trabajar en cualquier lugar.

El cambio climático entre Suiza y Rio de Janeiro, son como la cara y la cruz, variación que Maia nota pronto y le causa algún que otro estrago. Una vez instalada decide contactar con Floriano Quitelas, un joven escritor e historiador para el que ella ha realizado la traducción de su próxima publicación. Floriano, ya era conocido en su ciudad por su novela, aunque se ganaba la vida como guía turístico, en tanto y cuanto llegaba la fecha de lanzamiento y promoción de la obra.

Maia y Floriano, pronto congenian e intercambian biografías personales. Floriano, hará de guía perfecto, le contará la historia y leyendas de la ciudad y de su hermoso Cristo Redentor, y juntos emprenderán la búsqueda de sus antepasados; aprovechando los conocimientos históricos y sociales de Floriano se lanzan a la aventura de indagar, investigar y saber lo ocurrido realmente.

A Casa das Orquídeas, será punto fundamental de partida; en su primera inspección encontraran a una anciana enferma y a una doncella rígida y hostil sin voluntad de colaborar, siendo la segunda gran colaboradora al ceder una serie de cartas que guardaba secretamente, misivas añejas que narraban de primera mano más realidad que la aparente y con la confidencial que existía entre destinaria y remitente.  

Maia, se deja llevar por la locuacidad de Floriano y la búsqueda va dando sus frutos… 

Gracias a la generosidad de aquella madura servidora de la Sra. Carvalho –en las citadas cartas-,  encontraran el hilo conductor desde el pasado a la actualidad y Maia, sabrá situar la historia de las generaciones precedentes. A partir de ese momento comienza una intensa búsqueda entre los longevos supervivientes de la época y así ir rellenando los pasajes de una familia que no era tan perfecta como demostraba y donde ella verá reflejado su propio carácter e ímpetu, en el fondo no era tan diferente a ellos.

Leyendo LAS SIETE HERMANAS (I) nos encontraremos una peliaguda historia familiar, llena de leyendas, testimonios y sucesos que toda familia pudiente pretende esconder bajo la alfombra o en el fondo del armario; todo menos quedar en evidencia ante una sociedad estricta de normas y demasiado pendiente de la vida ajena. También descubriremos el precio a pagar por el estatus social; el escaso valor a las mujeres y la nula posibilidad que estas tenían ante las inquietudes intelectuales, más allá de los desgastados libros familiares.

De manera amena y cautivadora Lucinda Riley, consigue embaucar al lector entre sus líneas, para contarnos de manera agradable pasajes históricos reales y presentándonos personajes de renombre mundial por diferentes artes.  Lejos de la desgana nos atrapara en una lectura. En el marco incomparable del país carioca, la autora nos desvestirá una ciudad llena de magia y colorido de lo más sugerente.

Acompañando a Maia conoceremos a una mujer actual; culta, llena de coraje, sin miedo a la verdad y consciente de cómo y porque ha llegado hasta aquí. En memoria y agradecimiento de su padre Pa Salt.

Finalizare diciendo que nos encontramos ante una novela de gran peso y no me refiero a su consistencia, sino, a lo que se avecina. Supongo que esta, será la primera entrega de lo que podemos augurar como una gran -saga-, ya que por el comienzo y desarrollo de la misma,  pensaremos que muchas protagonistas se quedan en la vereda del texto, pero espero no sea así y sobre entiendo que serán tantas entregas como hermanas, pero claro, para eso debemos de esperar y no vaticinar lo que aún no tenemos entre manos.

Lee y opina. http://mire-pa.blogspot.com.es/2016/05/las-siete-hermanas-la-historia-de-maia.html#links

Existe un dicho: “Para que te cataloguen persona es necesario morirse”.

Sentado en el balancín que separa la vida  de la muerte, nuestro protagonista, con clara intención de dejar huella en este mundo, hace una rememoración de los años vividos.  Sabe que el tiempo apremia y que no será recordado precisamente por sus buenas acciones, tanto así, que deja estipulado el reparto de su herencia sin favorecer a ningún Spencer ¿Será capaz de hacer bien, lo que hizo mal en vida?

Ya desde bien pequeño Thomas, mostraba cierta hostilidad hacia sus semejantes, al cariño familiar y a las normas escolares o sociales, era rebelde por naturaleza y sistema; todos cuantos le conocían acababan comparándole con su hermano, parecían la cara y la cruz de una moneda, tanto en apariencia como en nobleza, eran como el bien y el mal.  En principio sus padres lo achacaban a los caprichos típicos de un chiquillo mal criado, ya que los Spencer disfrutaban de una holgada posición económica y formaban parte de la distinguida sociedad.

Cada día Thomas, día se despertaba con el único propósito de fastidiar a su hermano y minar la paciencia de su madre bajo la benevolencia de su padre. Sus travesuras no tenían límite y algunas eran verdaderamente intencionadas, llegando incluso su madre, a temer por la integridad de Jaime, aunque éste lo viera todo con los ojos de la inocencia.

Todo empeoro el día que escucho parte de una conversación de sus padres, que trataban de comprender el mal comportamiento del chico. Oído lo oído, se fue lleno de rabia y haciéndose el juramento de que a partir de ese momento todo cambiaría para peor, les pagaría de la manera más dañina.

“Un niño dictador “no nace, se hace. Su principio filosófico es primero yo y después yo. Cree que el mundo gira a su alrededor, no se pone en el lugar del otro y empieza por insultos, rompe objetos y puede llegar a agresión física. Lo que hace es machacar al otro de una u otra forma” (Javier Urra).

Ahora entendía las diferencias físicas entre Jaime y él; el nulo parecido con John, aquel que consideró su padre hasta entonces; y odio más aún a Carmela, su madre, por los rasgos transferidos. Siempre había sentido cierta repugnancia de su aspecto hispano, no lo gustaba el color de su pelo oscuro, el tono soleado de su piel o los ojos que le impuso la genética. Renegó de toda la familia y rompió todo vínculo con ellos. Ya no era un Spencer y tampoco admitía ser descendiente de emigrantes.

Entre rencores e inquina, se hizo adulto; con los años se convirtió en una persona fría, calculadora, dañina y sin escrúpulos; hacía daño por el mero hecho de hacerlo y con el único propósito de humillar a su rival. No consiguió ganar más amor que el amortizado con dinero y joyas; ignoraba el valor de la amistad, traicionaba a cualquiera de sus cercanos por la satisfacción de degradar. Él nunca daba un paso atrás y era consecuente con ello ¿o no?

De manera profesional era el perfecto vendedor de humo, sin principios ni prejuicios, experto en engatusar a cualquiera y capaz de sacar las miserias de quien fuera necesario o manipular la verdad y la mentira como el mejor buscavidas oportunista y con la suerte de cara.

Con Historia de un canalla, el lector puede sacar varias conclusiones, si también lee el mensaje subliminal entre líneas o por lo menos así lo pensé yo; qué Thomas, fue verdaderamente un canalla desde su infancia hasta el final de sus días, era el perverso maltratador que escondido en trajes caros desahogaba su cobardía; jamás conoció o no quiso reconocer el inmenso amor de sus padres que no fueron capaces de corregir su tiranía a tiempo; tampoco encontró en su camino el sentimiento de amar y ser amado.  Definitivamente Thomas fue dueño de su vida y esclavo de sus desprecios, un dictador engreído que encontró en sus excesos al mayor rival y con quien perdió el mayor de los desafíos. Aquí nos topamos con unas memorias informales, donde la moralidad del protagonista se duplica al ser consciente de sus maldades y resistente a reconducir sus errores, pese a las múltiples oportunidades que le da la vida y quienes le rodean.

JULIA NAVARRO. Da un vuelco total a su tintero, después de años paseando por la historia con “La Sabana Santa” o “La biblia de barro” entre otros, nos acercó a una realidad muy latente en “Dime quien soy” y “Dispara, yo ya estoy muerto”. Y ahora con “Historia de un canalla” plasma los peores efectos que el dinero y el poder pueden ocasionar en el ser humano. Ella como nadie, inventa historias a las que realmente podríamos poner nombre propio, quizás alguien conozca a un –canalla- indeseable o haya sido víctima. La creatividad de Julia no tiene límites y según palabras de la propia autora “Contar una historia desde la piel de un malvado no es fácil. Vivir con ese personaje durante estos dos años ha sido lo más complicado”.

Conocido por sus alumnos como -Iron Man-, mote que, debido a su forma de moverse, rígida y sin expresividad a causa de un accidente en su juventud, le había sido asignado desde hacía años, Mickel Backman disfruta de una vida tranquila al lado de su esposa Myrna, una escritora de renombre a la que quiere y admira y junto a la que ha criado a su único hijo Ragnar.

Cuando Mickel, profesor de literatura en Abo Akademi, propone a sus alumnos que elijan un autor modernista para elaborar, a través de su vida y obra, un ensayo como parte de los trabajos del curso, jamás imaginó que un acto tan aleatorio pudiese cambiar su existencia para siempre.
Su mundo comienza a tambalearse la mañana en la que Pasi Maars, uno de los estudiantes que asiste al seminario que imparte, le comenta que ha decidido centrar sus esfuerzos en investigar la producción literaria de Leander Granlund y que para ello pretende hacerse con una tesis inacabada sobre la vida de dicho autor, escrita por Dietrich Wangman, en la que se analiza su obra más famosa titulada “De los oscuros dolores de la vida”.

Incapaz de esconder las terribles sensaciones que le genera el volver a escuchar los nombres que Pasis pronuncia, Mickel, trata de convencer a su alumno para que elija otro escritor sobre el que desarrollar su trabajo. A pesar de la insistencia, sus exigencias no son aceptadas.
Acosado por los fantasmas que esconde en su pasado el comportamiento de Mickel desemboca en una fuerte de discusión con su esposa. Las duras palabras entre ambos obligan al profesor a confesar una infidelidad ocurrida hace 15 años con Elsa, una joven estudiante con la que creyó recuperar el sentido de una vida que había perdido.
Incapaz de olvidar la felicidad de un pasado al que desearía regresar Mickel acude al hospital en el que permanece ingresado su antiguo amor, un lugar en el que el cuerpo de la joven es mantenido con vida tras su intento de suicidio, el mismo día en el que daban por finalizada la relación entre ambos.

El reencuentro con una realidad que no deseaba contemplar remueve el interior de Mickel llegando a cuestionarse su culpa en lo sucedido años atrás. Los remordimientos afloran y no tan solo por el dolor infligido a su esposa con la traición a sus votos matrimoniales, sino también con la sensación de culpabilidad ante la situación en la que se encuentra Elsa, postrada en una cama, con su cuerpo mutilado y sin posibilidades de recuperar una vida que perdió bajo las ruedas de un autobús.

Mientras el presente del profesor de desmorona, Pasi Maars, el detonante del caos que rodea a Mickel, lucha por conservar la suya intentando no sucumbir a las pulsiones que le llevan a considerar como una opción real, en su caótica vida, el suicidio. Para ello, cuenta con el apoyo incondicional de Calle Hollender, su mejor amigo, un aspirante a actor, que trata de ganarse un dinero extra con el que completar su beca de estudios a través de pequeñas actuaciones en teatros y bares como monologuista.
Los tres protagonistas se unen a través de los miedos, mentiras y obsesiones de cada uno, en la búsqueda de los textos de Leander Granlund, un autor maldito al que la historia acusa de crear una obra capaz de empujar a quien sea sus versos a la autodestrucción.
¿Será cierto que quien lee sus escritos sienta la necesidad de suicidarse, de terminar con su vida, atrapado por un poder imposible de explicar?

La historia se centra en la vida de Mickel Backman, Calle Hollender y Pasi Maars. El autor describe tres personalidades y tres momentos muy diferentes en la forma, en el momento existencial, pero muy cercanos en el fondo y en los sentimientos. Narra la soledad y el vacío que se siente al no comprender, ni encontrar sentido al momento vital en el que se encuentran y sobre todo a su necesidad por buscar un motivo, para no sucumbir al deseo de la autodestrucción. La narración, escrita siguiendo la cronología de los personajes, salvo los momentos en los que Mickel recuerda el pasado con su amante y su relación con Dietrich Wargman, provoca en el lector una mezcla de sensaciones que van desde la intriga, al más puro estilo de una novela policíaca, al terror más oscuro.

Kaj Korkea-aho (1983) autor de “El libro maldito” es uno de los escritores suecofinlandes más destacado de su generación. En 2014 fue incluido en la antología Granta Finland como uno de los veinte mejores novelistas finlandeses. Junto a su trabajo como autor de novela, Kaj Korkea-aho dedica su tiempo a la comedia en radio, televisión y teatro, además de ser columnista y escribir obras tanto para teatro como para televisión.

El autor va dejando pinceladas, a modo de pequeñas huellas a lo largo de los capítulos, que marcan la senda que el lector debe recorrer para llegar a un desenlace que, aunque imaginable no deja de ser angustioso.
Quizás debido a mi desconocimiento de los patrones que rigen la sociedad suecofinlandesa, me ha sorprendido la referencia constante que se hace a la tendencia suicida dentro de una comunidad joven, ambiente en el que se mueven los protagonistas, estudiantes universitarios de clase media, sin que el entorno que les rodea parezca preocupado por este hecho.