Paloma no es lo que se podría decir una persona aventurera, contrariamente a su compañera Susi, quien si lo es por naturaleza.Paloma es bibliotecaria en un pequeño pueblo de España, secunda a su compañera quien la adelante en años de trabajo y experiencia a pesar de no ser profesional.El empleo de Paloma se ha vuelto más una función social para ella y no le desagrada, pues la atención a las necesidades de la población inmigrante o cuestiones propias de las familias de la zona son también de relevancia y la enorgullece poner allí su granito de arena.Sin embargo la preocupa la monotonía, la rutina y las pocas posibilidades de lograr la permanencia definitiva en ese trabajo.
Una tarde de regreso a su casa,en un barrio de inmigrantes descubre una vez más que el portón de acceso se traba impidiéndole pasar y al ir en busca del auxilio de su vecino hindú encuentra por azar un diario con una extraña solicitud de empleo. Paradojicamente ese portón que no se abría sin querer la llevaba a una puerta hacia el cambio que tanto deseaba. El aviso firmado por el aristocrático naturalista Mr. Hayes anuncia la búsqueda de una bibliotecaria interesada en viajar a Sudamérica con la promesa de un contrato por 3 años.Navegando entre el temor y la incredulidad Paloma se arriesga a contactarse con la Fundación que promueve la búsqueda.Pronto será elegida y se convertirá en la bibliotecaria que viajará al Paraguay para catalogar fichas de animales y plantas y ganar un sueldo mejor.
Allí la espera una tierra nueva con un clima tórrido, un extraño naturalista , una asistente llena de misterio y un par de militares de temer.Su mundo nuevo incluye nuevas costumbres, una pequeña comunidad con la cual pronto entablará lazos de amistad y un amor que nace al arrullo de la caída de los Saltos del Guayra.
Pronto descubrirá que este parque natural se ve amenazado por las promesas del progreso y la electricidad que pueden arrasar inundando todo lo conocido.
Las conductas evasivas de su jefe y del amenazante grupo que lo acompaña tienen que ver con los peligros que se ciernen sobre el lugar?un libro atrapante ,diferente y con un final digno de una aventura de misterio.

Magdalena es una profesional de la Economía, esposa y madre con una vida en apariencia realizada. Sin embargo,  últimamente las  pérdidas de su padre y  su hija la rondan repetitivamente como una nube de tristeza   impidiéndole lograr  la total plenitud de su ser. El azar la llevará a emprender un recorrido de aprendizaje espiritual y autoconocimiento  directo  desde Santo Domingo a Buenos Aires  para buscar sus raíces en los  recuerdos de su niñez y adolescencia. Lugares aquellos  donde bajo cielos estrellados y patios coloniales  ha sembrado las  «semillas de conocimiento verdadero» que  pueden activar el recuerdo consciente de quien es en realidad.
De vuelta en el Caribe, sus maestros y nuevos compañeros de viaje la ayudarán a reconocer el poder del  esfuerzo, la atención enfocada y la importancia de situarse  y conectarse con el Aquí y Ahora para no perder de vista lo que es verdaderamente importante.Una historia que es efectiva y nada pretenciosa y que por ello podría haber surgido del diario o de los cuadernos de notas de todo aquel que se haya preguntado el sentido de su vida y haya puesto suficiente practica en ello y como lo menciona Magdalena en sus páginas: «documentar ese propósito»  estando atentos a la identificación para romper los patrones negativos que impiden el real contacto con el ser y la naturaleza. Basados en  preceptos acuñados por Gurjieff y Oupensky relacionados a los procedimientos que  son necesarios para que los seres humanos despierten y se encaminen hacia el autoconocimiento, la atención consciente de  si y el entorno, la autora logra con su grupo iniciático dar comienzo a un camino de despertar e iluminación propio pero que, como descubriría después pudo convertir en palabras para inspirar a otros en su propio despertar.  La historia transcurre entre las décadas de los 80,90 y la actualidad, para ello se  utilizan con suma destreza saltos temporales que sitúan al lector con fluidez no solo entre años diferentes sino en escenarios disimiles pero tan vívidamente descriptos que se asimilan a imágenes cinematográficas y que ayudan a armar como  piezas de un rompecabezas la historia de la protagonista de manera muy amena y sin sobrecarga de adjetivos. Es agradable descubrir como la economista es buena narradora y la mística es poeta. La sensación de que el libro lo ha abrazado a uno durante toda la lectura perdura mucho tiempo y seguramente proviene de haberse topado con un Maestro de esta nueva era, a pesar de  que se narran hechos ocurridos hace varias décadas. Un Maestro más cercano a uno, más real que es en definitiva una de las enseñanzas del misticismo: lo simple es lo valioso y en lo más pequeño es posible ver la semilla de lo más grande.  Un Maestro que se ha despojado de sus «pertenencias» mundanas y desnudo entrega al mundo el resultado de su propia búsqueda interna. Un Maestro que te invita a seguirlo esta vez, desde las letras y asumir seriamente el compromiso del despertar a tu propio ser y tu valía.