«Que bien me haces cuando me haces bien» es la nueva novela de Albert Espinosa. Es la tercera parte y cierre de la trilogía de relatos. Los dos anteriores son «Finales que merecen una historia» y «Si nos enseñaran a perder, ganaríamos siempre».

«Que bien me haces cuando me haces bien» contiene 22 relatos para curar el alma, como el propio autor los denomina.

La edición por parte de Grijalbo es un lujo, ya que han realizado una edición ilustrada por Vero Navarro. Además, es en tapa dura y el gramaje de las páginas es más gordito de lo habitual, aportándole mayor calidad y resultando muy agradable al tacto.

Vero Navarro ha realizado un trabajo magnífico con las ilustraciones. Están al inicio de cada relato, y captan la esencia de cada uno de ellos o bien de alguna escena más relevante. Tienen ese aspecto vintage, de film de película, los famosos fotocromos que se colgaban en la entrada de los cines. Tienen algo hipnótico, que hace que te quedes observándoles largo rato, ya que además algunos de ellos tienen ligeros cambios de una ilustración a otra, creando una secuencia muy agradable. Ha sido muy divertido buscar esos ligeros cambios, que en ocasiones eran solo de sombras.

Aunque «Que bien me haces cuando me haces bien» es el cierre de la trilogía de relatos, se puede leer sin ningún problema sin haber leído los anteriores. El autor hace una introducción muy emotiva, y explica que algunos personajes son viejos amigos de los relatos anteriores. Aún así, no he tenido ningún problema en adentrarme en ellos ya que son totalmente independientes. Pero eso sí, me ha dado la curiosidad de saber qué les ocurría en los otros relatos, así que no creo que tarde en hacerme con los otros libros.

Lo que más me gusta de Albert Espinosa es su manera de narrar. Es directamente un soplo de aire fresco que me envuelve y me aísla de todo menos de la lectura. Me encanta todo lo que consigue transmitir con las palabras, ya que hace que los sentimientos queden a flor de piel. Además, cada relato es muy ameno de leer, siendo una lectura ideal para esos pequeños ratos antes de dormir.

Con «Que bien me haces cuando me haces bien» me ha sorprendido, ya que algunos relatos se alejan de lo que en otras ocasiones he leído suyo. Con algunos como con «Te cubro el karma» o «La cucaña de la vida» he descubierto su lado más tétrico o de thriller que me ha sorprendido y gustado a partes iguales. También les encontraremos con una parte de fantasía como «Tu mundo mi universo» o «De camino a casa» pero que no dejan de tener también su lado emotivo. «Lugares que no quiero pero necesito» me ha dejado pensando, ¿será verdad?. «Falso como un placebo, efectivo como una vacuna» me ha dejado la cabeza loca, aún le ando dando vueltas… Y así podría seguir con cada uno de ellos, ya que todos tienen algo peculiar, pero a la vez con su esencia. Estoy segura que con más de uno la mayoría de los lectores se emocionará e incluso echará alguna que otra lagrimilla. Todos y cada uno de los relatos merece la pena ser leídos con calma y darse un tiempo tras acabarlo antes de empezar otro.

Por otro lado, al inicio de cada relato en autor ha incluido una cita de algunas de sus películas con soplo, con ciertas escenas que recomienda. Algunas las conocía pero otras no, así que ya las tengo anotadas para buscar ese soplo cuando sea necesario.

Tan solo me queda decir, GRACIAS Albert Espinosa por un libro más.

«Partida final» es la nueva novela de Daniel Cole. La tan esperada continuación de la trilogía de «Ragdoll».

Leí «Ragdoll» cuando salió en su momento, y la verdad que había perdido la pista al escritor, ya que su lectura me dejó con sentimientos encontrados. En esta ocasión, comencé «Partida final» sin saber que era la tercera parte. Aunque se puede leer sin problemas, recomiendo encarecidamente leerlos por orden, ya que se hacen alusión a los casos de los libros anteriores, y además la historia de los personajes tiene su continuidad,

Al igual que «Ragdoll» me dejó un poco fría, «Partida final» me ha encantado. Se nota la evolución de Daniel Cole a la hora de escribir, pero también de crear la trama, mucho más compleja y con pequeñas sorpresas que van dando pistas para que el lector pueda elucubrar su propia teoría. En esta ocasión no me ha dado la sensación de que el autor ha engañado al lector.

Los personajes son muy originales, y el plato fuerte de la historia, con una personalidad muy potente en todos ellos. Además, aparte de la investigación en sí, el autor ha creado muchas situaciones divertidas, que si bien algunas de ellas un poco extremas, han logrado sacarme más de una carcajada. Un punto a favor que permite que la historia resulte más amena y distendida. De igual manera, el autor ha incluido rencillas entre los personajes, dando otro camino a la narración.

Daniel Cole narra la historia a dos tiempos, alternando los capítulos del presente y la investigación en curso, junto con algo sucedido en 1979. Me ha resultado muy entretenido y también permite conocer un poco más a los personajes y su implicación en la historia.

La trama principal, presenta un caso muy típico: una muerte en una habitación cerrada. Pero a pesar del tópico, la historia contiene misterio y suspense por descubrir si en realidad ha sido un suicidio o un asesinato. Al estar directamente relacionado con los personajes, el caso se vuelve más personal y la implicación de los detectives más exhaustiva, llegando a poner en peligro su vida. El resultado de todo ello, es un thriller muy adictivo.

«Partida final» ha logrado que haga las paces con Daniel Cole, no tardaré mucho en leer «Ahorcado» para poder unir los puntos que se me han quedado pendientes y por supuesto, sus futuras nuevas novelas.

«La hora del lobo» es la última novela de Guillem Morales. Tiene una mezcla de thriller, con terror tanto físico como psicológico brutal. Es de esas novelas que deja con la boca abierta.

Lo cierto es que no sabía que esperar pero ha conseguido engancharme desde la primera página y contra más leía más ganas tenía de leer. La prosa de Guillem Morales me ha cautivado totalmente y me ha gustado mucho su forma de jugar con lo real y la ficción, y con la mente del lector. Ha habido muchos puntos de la historia en que dudaba de lo que leía y del protagonista. Pensaba que se lo estaba inventando, otras veces que no, y no encontraba ese termino medio entre la realidad o la ficción. La lectura es muy amena y con una narración ágil, con capítulos en los que continuamente pasan cosas.

El protagonista de «La hora del lobo» es Miles, un niño de tan solo nueve años. La vida de Miles cambia cuando se mudan de casa, y comienza a tener pesadillas. Pero además, Miles tiene una imaginación desbordante, hasta el punto de que, motivado por una película de terror, dice haber visto a un hombre lobo de verdad.

Aquí el autor ha hecho un buen trabajo, ya que consigue que el lector pueda dudar. Tan pronto parece que Miles se lo inventa, como que es real y no se comprende la reacción de los padres. El terror existe, no está solo en los cuentos o las películas, y aquí el autor lo demuestra de diferentes maneras. Es un tira y afloja continuo que logra mantener la tensión durante cada una de sus páginas. No es hasta casi el final, que Guillem Morales desvela lo que ocurre y, en mi casi, literalmente, la cabeza me hizo «boom», dejándome con la boca abierta. Un final trepidante que no deja indiferente.

Recomiendo sin duda «La hora del lobo», es de esos libros que tiempo después siguen en la mente del lector.

«El libro más bonito del mundo: Una historia de amor» está escrito por Rosario Oyhanarte.

Lo cierto es que tanto la portada como el título me encantaron, y ya el aviso de «Una historia de amor» me acabó de convencer para animarme a leerlo. Pero, me he quedado con un sabor un poco agridulce.

Vaya por delante que la manera de narrar de Rosario Oyhanarte me ha gustado. Me ha resultado muy amena y cercana. De una sola tacada leí medio libro, ya que la lectura es fácil y ágil. En algunas ocasiones era como si una amiga nos estuviera narrando una parte de su vida, de un viaje o del comienzo de su historia de amor. A mí este aspecto en este tipo de historias me parece importante, ya que el lector se tiene que sentir parte de la historia para que los sentimientos consigan calar y provocar alguna reacción. Así que en ese sentido, la autora lo ha logrado.

El problema, en mi caso, lo he tenido con los personajes y con la historia.

A pesar de toda la historia de amor que encontramos entre sus páginas, los personajes implicados en ella, no me han parecido del todo real. E incluso diría que les he sentido un poco fríos y con reacciones que no me he llegado a creer del todo, todo demasiado medido y meticuloso.

Por otro lado, referente a la historia, Elisa es la narradora, y lo realiza a dos tiempos, de tal manera que el lector irá alternando el pasado con el presente, hasta llegar a la unión de ambos. Pero, por mi parte, esa «trama que sorprende» que se anticipa en la sinopsis, no la ha sido. El misterio del libro que Elisa está leyendo, me parecía demasiado obvio, lo cual le ha restado poder a la historia de la mitad del libro en adelante. La autora ha tirado demasiado de clichés y de referencias a libros y canciones por parte de la protagonista, me ha parecido excesivo e incluso algunas partes me han resultado más tediosas de leer. Para mi eran irrelevantes y no le encontraba tanta importancia dentro de la historia como la autora le ha querido dar. La historia de amor en sí es bonita, pero tampoco es una historia de amor que en mi caso me haya sorprendido, marcado, enamorado, o me haya hecho suspirar como me ha ocurrido con otras.

Con lo que si me quedo del libro, es con los mensajes que Elisa va descubriendo poco a poco en el libro que va leyendo, sobre la vida, el amor, el destino y la implicación que cada uno tiene en ello. Aunque son mensajes muy trillados, la manera de plasmarlos de la escritora me ha gustado, ya que me ha parecido original y con un enfoque adecuado para que el lector pueda pensar sobre ello.

En resumen, «El libro más bonito del mundo: Una historia de amor» es una historia muy fácil de leer, con luces y sombras, que entretiene, pero tampoco esperes mucho más de ella.

«El gato que amaba los libros» es una novela escrita por Sosuke Natsukawa, que deberían de leer todos los amantes de los libros.

Lo primero me gustaría destacar la edición tan bonita por parte de Grijalbo. A pesar de no ser una portada con colores muy llamativos, los elegidos crean una armonía muy bonita que resalta con los detalles en dorado metalizado.

Sosuke Natsukawa utiliza una prosa sencilla, muy amena de leer y que envuelve al lector en un ambiente mágico. Lo cierto es que «El gato que amaba los libros» es todo un homenaje a los libros, las librerías, los escritores y los libreros de toda la vida que aguantan a pie de cañón y para todos aquellos lectores que transmiten el amor por la lectura.

«El gato que amaba los libros es una historia cuyo protagonista, Rintaro, tendrá que superar una serie de obstáculos, todos ellos relacionados con los libros. La vida de Rintaro está muy unida a los libros, y al final de este viaje tan peculiar, encontrará el camino a seguir.

Rintaro realizará cuatro laberintos, en los que por un motivo u otro, los libros están en peligro. Me ha gustado mucho el enfoque que el autor le da a cada laberinto, ya que son reflexiones que se pueden aplicar en el día a día para los amantes de los libros.

Sosuke Natsukawa destaca la importancia de leer, pero leer bien, sin prisa, disfrutando de la historia e incluso releyendo los libros con los que más hemos disfrutado, ya que siempre tendrán algo nuevo que enseñarnos. Es importante leer, pero también disfrutar de ello, y de otras cosas que nos rodean. Todo esto y más, puede sonar muy filosófico, pero la realidad es que el autor lo explica de una manera sencilla y cercana, con la que el lector se sentirá identificado con alguna de ellas. Como dije al principio, todos los amantes de los libros deberían de leerlo, alguna de las reflexiones son destacables, y, sobre todo, quedarse con el mensaje de la importancia de dar nombre y voz a los libros, y conseguir transmitir a los demás el poder que los libros contienen.

Me gustaría destacar, que a pesar de que la historia es un tanto lineal, y no aporta una sorpresa o giro llamativo, la historia conseguirá encandilar al lector que sepa mirar un poco más allá del mero entretenimiento.

«La casa de las magnolias» es de esas novelas que me enamoran por su portada. Después, su sinopsis me atrapa y no puedo evitar adentrarme en sus páginas. Pero en esta ocasión, la historia no me ha acabado de convencer del todo.

Quizá no hubiese sido el momento de leer esta novela, o quizá mis expectativas tras leer la sinopsis eran muy altas. Pero lo cierto, es que, a pesar de que «solo» contiene 436 páginas, en algunas partes me han sobrado páginas.

Me está resultando muy difícil ordenar lo que he sentido mientras leía «La casa de las magnolias», y también tras su lectura, y quizá se deba al pequeño «caos» que he sentido mientras leía la novela. En algunas partes, se cambiaba el narrador y no se sabía hasta que «pasada» o se «decía» algo concreto que nos daba esa pista, de saber quién lo narraba. Así que por momentos me he sentido desubicada en la historia y eso ha provocado que no me sintiese parte de ella.

Vaya por delante, que lo primero que he de decir, es que la historia me ha parecido preciosa y entrañable y con unos personajes muy bien delineados y con poder dentro de la historia.

La maldad que destila el personaje de Cristina ha conseguido ponerme los pelos de punta en más de una ocasión. La inocencia de Aurora y el amor juvenil entre ella y Leonard me ha parecido muy tierno. Pero otros personajes, como Luis, o Isabel, me han chirriado un poco, al igual que algunas de las actitudes de otros. No sabría decir bien, pero hay algo que no me ha terminado de encajar del todo.

La historia entretiene, para pasar unas tardes tranquilas o leer antes de dormir está muy bien, de esas historias en las que no es necesario pensar mucho mientras se están leyendo. No es una historia que me haya cautivado ni dejado con la boca abierta. La historia en muchos aspectos me ha parecido predecible, he ido adivinando los movimientos que la autora iba a realizar, y por ende, la lectura de todo lo ocurrido hasta llegar a ello me ha resultado densa. Me ha faltado una pequeña chispa que me mantuviese la intriga. Me ha dado mucha rabia, por que, repito, la historia es preciosa, pero no me ha llegado a calar. Además, en algunos aspectos me ha parecido un tanto repetitiva, daba la sensación de que la historia no avanzaba por mucho que supuestamente pasaba el tiempo.

Creo que todo ello se debe a la manera de narrar de la autora o la manera en que ha decidido jugar con los dos tiempos en los que transcurre la historia. 1924 y 1992. Pero también al espacio tiempo que menciona referente a algunos lugares.

Vivo en Cantabria y he nacido en Cantabria, y para mí fue una sorpresa encontrar que la historia se ambientaba aquí, más concretamente en Santilla del Mar, ya que no lo indicaba en ningún lugar. Quizá por eso me han chocado tanto algunos detalles. Por ejemplo, viajar desde Santilla del Mar a Comillas, es como que hay un abismo de distancia, supone un suplicio para los personajes, y me refiero a 1992. Yo he hecho ese viaje en numerosas ocasiones, por carretera comarcal, y no es tan suplicio como pretende ser en el libro. Otro apunte, sería la situación personal de la protagonista, referente a sus viajes de Santander a Santilla del Mar por la situación sentimental y laboral. Quizá la autora lo ha querido enfocar más como «incordio» o «perdida de tiempo», al hacer los viajes en coche, pero por algo personal de la protagonista o de la unión con la madre y el pueblo. Pero lo cierto, es que en la tierruca, siempre ha sido habitual esos desplazamientos, de un pueblo a otro, o a la capital, por motivos laborales y de familia, es algo que por la geografía de Cantabria sus habitantes hemos tenido que asumir y que tenemos arraigado desde siempre, pero que no es tan extremista como lo plantea en la historia. Obviamente en 1924, en carruaje y por los caminos que plantea la autora, pues es diferente, pero en lo referente a 1992, no estoy del todo de acuerdo con el planteamiento que se le ha dado, que en ocasiones parece que el personaje tiene que estar todo el día de viaje. En los agradecimientos la autora menciona un viaje a Cantabria, en donde encontró la inspiración para la novela. Desde aquí la invito a que vuelva, pero que también se deje empapar por las historias de los vecinos, de diferentes edades, tanto de pueblos como de capital, que le puedan dar ese toque personal de la tierra que creo que le falta a la historia y a los personajes. Que de verdad, las distancias no son tan abismales como se deja ver en la historia, en mi infancia, allá por 1992, lo normal era echar la tarde en casa de un familiar en un pueblo, o ir de paseo en familia, y se iba y se volvía en la misma tarde y daba tiempo de sobra a echar un paseo bien majete.

«Estaba preparado para todo menos para ti» es la nueva novela de Albert Espinosa.

Para mi, Albert Espinosa tiene una manera de escribir que encandila, y como en el caso de esta novela, que cura, que sana. Me encantan todas sus novelas, así que no me puedo quedar con sola una, ya que todas tienen algo que les hace destacar, ser especiales. No sabía que me iba a encontrar en «Estaba preparado para todo menos para ti», ya que no suelo leer la sinopsis de ciertos libros que sí o sí quiero leer, y quizá por eso me ha sorprendido tanto.

«Estaba preparado para todo menos para ti» no se puede catalogar como un libro de autoayuda, aunque quizá algo de ello sí que tenga. «Estaba preparado para todo menos para ti» es una novela que contiene 23 soplos, como el propio Albert Espinosa dice, o 23 «consejos» para el día a día.

Pero ojo, no es el típico libro de consejos motivacionales ni mucho menos. Es un libro en que el propio autor nos desgrana situaciones importantes de su vida, y nos detalla cómo se sentía, cómo las vivió y sobre todo, que aprendió de ellas y que soplo aplica en cada momento para «superarlas». Hay algo que me ha gustado, y es que el propio autor nos dice que llegarán momentos en nuestra vida duros, que nos costará superar un «x» de tiempo, y que eso no es malo, al contrario, sólo que podemos aplicar ciertos soplos, encontrar gente amarilla o gente cascabel que nos ayude a vaciarnos y comenzar de nuevo.

Soplos para sentirnos bien con nosotros mismos, para alejar a la gente ruidosa, y sobre todo saber detectarlos, algo muy importante. Soplos para que de cada parte mala, podamos encontrar algo bueno, porque lo uno va unido a lo otro. Y otros muchos más, ya que son 23 en total, que merece la pena descubrir por uno mismo, pero también porque leer cada experiencia del propio autor es más importante para entenderlos. Y también para saber porque son 23.

Por otra parte, la edición de «Estaba preparado para todo menos para ti» no podría ser más especial, a la altura del texto que encontramos en su interior. Con cada soplo, encontramos unas páginas a color, con una ilustración y además una frase, de diferentes personajes de la historia, pero que en cierta manera están relacionadas con el soplo que les precede. Las ilustraciones ayudan a que el lector pueda tener un momento de impasse entre soplo y soplo.

Después de los 23 soplos, el autor incluye unas listas de sus libros, canciones, películas y obras de arte que le ayudan a sanar, por diferentes motivos. Yo no he dudado en apuntar unos cuantos de ellos. Y además, cuando al inicio de la novela nos indica que nos dejará dicho listado, no pude evitar saltar al final del libro y buscar las canciones. Algunas de ellas las he ido escuchando mientras leía el libro, y la experiencia a sido maravillosa.

En resumen, «Estaba preparado para todo menos para ti» es una novela para leer poco a poco, yo recomiendo leer un soplo cuando el cuerpo nos lo pida, para poderlos hacer nuestros y ver lo especial que es cada uno de ellos.

Laura Gallego nos presenta su última novela «El ciclo del eterno emperador». Aunque está orientada para un público juvenil, de 13 años en adelante, yo la he disfrutado muchísimo, y desde mi punto de vista, es una lectura para todos los públicos, en especial si eres un amante del género de la fantasía y la magia.

Si que es cierto, que al principio me ha costado un poco hacerme a la historia, pero creo que es algo habitual en los libros de fantasía. Es un mundo nuevo, y con seres diferentes, nombres difíciles y costumbres que nos van a sorprender. Pero Laura Gallego ha sabido cómo enfocar la historia para que el lector se sienta parte de ella y todo lo nuevo le resulte habitual y fácil de entender, algo importante para los jóvenes a los que esta dirigida. Con una narración amena, ligera y muy divertida, Laura Gallego nos adentrará en un mundo nuevo lleno de seres misteriosos y mágicos como los zaldrim y con un emperador muy especial.

Vintanelalandali (los nombres nos van a sorprender mucho) es la reencarnación del nuevo emperador, en concreto la número decimoséptima. Un emperador puede llegar a vivir mil años (años arriba años abajo como pronto descubriremos por sus antepasados), y tienen la peculiaridad de que cuando sus poderes despiertan, su cabello se vuelve blanco, un signo clave para diferenciar al nuevo emperador. Pero cuando un emperador muere y renace, un augur es el encargado de unirse a esa nueva alma y descubrir dónde va a renacer. «El ciclo del eterno emperador». Aunque como pronto descubriremos, la historia de Vintanelalandali no es la historia de un emperador «típico», por así decirlo.

Laura Gallego narra la historia a dos voces. Por un lado tenemos la de Vintanelalandali, con su vida, su día a día en palacio, la alta sociedad, que se diferencian por sus nombres largos y toda la historia sobre Akidavia que nos descubre. Y la segunda voz, es la de un campesino, habitante de Gratitud, llamado Kelan, con el que descubriremos el otro lado de la moneda: la gente pobre, las injusticias, el hambre y la historia de Akidavia desde otro punto de vista.

El mundo que Laura Gallego ha creado en «El ciclo del eterno emperador» me ha fascinado. Me ha parecido muy original, muy bien organizado y sobre todo la historia, que mantiene al lector lleno de intriga desde la primera página. El halo de misterio creado alrededor de Vintanelalandali y Kelan ha conseguido que no pueda parar de leer. Aparte, la historia está llena de acción y magia, con personajes muy dispares. La parte de los zaldrim, me ha parecido también muy curiosa y original, nunca había leído nada similar sobre ellos. Y la guinda es que también encontramos un pequeño toque emotivo, gracias a la personalidad de los personajes. «El ciclo del eterno emperador» no es la típica historia de fantasía de guerra y paz o de reconciliación entre tribus.

«El ciclo del eterno emperador» es una historia que he disfrutado mucho, se ha convertido en una de mis favoritas, en lo que a fantasía se refiere.

Lo primero, destacar que no soy asidua a leer novelas de género histórico. Por eso cuando Alberto Caliani anunció su nueva novela «El puño del emperador», me quedé un poco plof, ya que «La Iglesia», la novela que leí suya, me encantó por el toque de thriller y terror que contiene. Por suerte, haciendo caso al propio autor en sus numerosos comentarios en redes sociales, a todo aquel que le decía lo mismo sobre la novela histórica, me animé a leerlo… y ¡¡menos mal!!, ya que sin duda, es de lo mejor que he leído este 2021.

Alberto Caliani nos sumerge en en año Año 171 d.C., en Austria, y más concretamente en Carnuntum, con el emperador Marco Aurelio. Reconozco que el inicio de la novela, con la parte política y las guerrillas que van explicando contra los bárbaros me costó un poco, ya he dicho que no soy de novela histórica. Por suerte, los capítulos se iban alternando con otras historias paralelas: Jano, Ictis y Tamura. Así que enseguida quedé enganchada a esos tres, y mi mente ya iba pensando cómo se iba a unir el destino de todos ellos.

Tamura es un personaje que consigue robar un trozo de nuestro corazón nada más conocerla. Valiente, fuerte y decidida, no me teme a nadie, más bien todo el mundo le teme a ella. Me ha gustado la personalidad que el autor le ha dado, su manera de ser y de actuar y la evolución que en ella se aprecia según avanza la novela.

Tamura no es la única mujer que encontramos en la novela que nos va a sorprender.

Ictis… Ictis es difícil de explicar, ya de entrada, ¿quién va a todas partes, hasta para dormir, con una cabeza de moloso encima de la suya? Reconozco que es un personaje que al principio no me gustó, un embaucador que va por libre. Pero poco a poco, le he llegado a coger un poco de cariño. Sin duda, es el alma de la novela en más de una situación.

Por último, Jano, quién da nombre al libro, ya que le llaman «El puño del emperador». Un romano duro, pero un general sin legión que tendrá que hacer frente a unas de las situaciones más difíciles por las que ha pasado nunca Carnuntum.

«El puño del emperador» es una novela con la que me he reído a carcajadas. Alberto Caliani ha sabido darle un toque muy divertido durante toda la novela, por diferentes motivos. Por ejemplo, el perro Uteljarab (si no fuese difícil de pronunciar, me lo apuntaba como nombre para mi próxima mascota), o los sestercios. No hace falta decir más, quién lo lea o lo haya leído, sabrá a lo que me refiero, son detalles que hay que descubrir por uno mismo. Hay otras muchas, que hacen la lectura muy amena y diferente.

Alberto Caliani no ha perdido su huella de thriller y terror. La parte de thriller está reflejada durante toda la novela, ya que las historias de los personajes abarcan muchos caminos, y en cada uno de ellos nuestro ansía por leer y saber que pasa se apoderará de nosotros. La parte del terror…los crímenes sucedidos en Carnuntum me han puesto la piel de gallina, la misma sensación de angustia que experimenté en «La iglesia», aunque con un toque muy diferente.

A lo largo de la novela, que recordemos que son 724páginas (por cierto Alberto Caliani, quiero otras 724), hay muchas escenas que me ha puesto en tensión, y que no podía dejar de leer. Pero el final… ese final es de infarto, y no estoy hablando de un final de 30 o 50 páginas. Si no un final de unas 200 páginas en que era un sin vivir continuo, con el corazón en la garganta y los nervios a flor de piel. Mantener esa sensación durante tantas páginas no es nada fácil, pero Alberto Caliani ha hecho un trabajo excepcional.

«El puño del emperador» tiene intriga, aventura, batallas, humor, terror… todo lo que podáis imaginar, ¿Quizá también amor? Quién sabe…

Me llamó mucho la atención la sinopsis de «Dos vidas para Lydia» y su portada me acabó de convencer. «Dos vidas para Lydia» prometía emoción, miles de sentimientos y una pizca de esperanza. Y ha sido así completamente mientras lo leía.
Josie Silver narra la historia de una manera muy delicada, fluida y con mucho sentimiento. A lo largo de la historia he encontrado frases y reflexiones que me han parecido muy buenas, y en las que merece la pena pararse a pensar un poco.
Lydia, es nuestra protagonista. En el prólogo, su vida cambia, cuando la noche de su cumpleaños, su prometido, fallece en un accidente de coche. Es un prólogo que me encogió un poco el corazón, y que ya nos adentraba en las partes duras que iremos encontrando a lo largo de la historia.
La historia está narrada por Lydia, los capítulos van saltando de día a día, mes a mes, desde el 2018, hasta el 2020. Lydia nos presenta su día a día, cómo se siente, cómo está pasando el duelo y cómo poco a poco, empieza a encauzar de nuevo su vida.
Todo comienza con unas pastillas rosas, unos somníferos para dormir, que la llevan a un mundo de sueño paralelo, en el que Freddie, su prometido, sigue vivo. En sueños Lydia vuelve a estar con él, a reír con él, y a sentir que ella está viva. Lydia ha encontrado la manera de cubrir su dolor.
De esta manera, Josie Silver nos presenta los capítulos con «Dormida» o «Despierta» y Lydia vivirá dos vidas diferentes.
Aunque pronto se da cuenta, que en la vida paralela, con Freddie vivo, no todo es perfecto, y allí también hay pérdidas.
Lydia nos explica continuamente cómo es llevar esa doble vida, cómo lo que aquí te hace triste, allí te hace feliz, y viceversa. Pero sobre todo, Lydia me ha enseñado a disfrutar el momento, ha pensar más en el ahora, menos en el mañana, y a dejarnos llevar. La vida está llena de momentos felices, pero también de momentos tristes, sea cual sea el camino que tomemos. Por eso, tenemos que aprovechar lo que cada día nos trae, con nuestra pareja, nuestra familia, nuestros amigos, o en el trabajo. Situaciones que no volverán, y que no nos pueden dejar anclados a un «y si…».
Lydia aporta ese toque de superación, de ilusión y esperanza, que todos necesitamos en un momento dado. Lydia enseña a romper con el miedo, a ser valiente para decidir con que vida quedarse.
Quizá, por ponerle un pequeño pero, hasta más o menos la mitad del libro, me ha parecido la historia un poco lenta, que se recreaba demasiado en lo mismo continuamente. Tenía ganas de algo más de movimiento, de cambios y no las mismas partes edulcoradas. Ese cambio, llegó en el momento justo, desde ese punto hasta el final, no pude dejar de leer.
«Dos vidas para Lydia» es una novela que me ha enamorado, por su historia y por cómo está narrada. La recomiendo sin dudarlo.

«El instinto» podríamos decir que es una historia de 4 generaciones. 4 mujeres, 4 madres de las que poco a poco iremos conociendo su historia, la cual se nos quedará grabada por el horror que esconde.
Aunque la protagonista indiscutible que nos presenta Ashley Audrain es Blythe y su hija Violet, a lo largo de la novela encontramos capítulos del pasado, sobre la madre de Blythe, su relación con ella, y aparte la relación de la madre con su propia madre. Esos recesos al pasado nos sirven para ir encajando partes de la historia, sentimientos y acciones que encontramos en el presente.
Decir que «El instinto» me ha puesto en algunas escenas los pelos de punta es quedarme corta. Más bien es un horror que en pocas situaciones sentimos: el horror de lo antinatural, del terror puro, del miedo a nuestros sentimientos, a nuestros pensamientos.
Me ha gustado mucho como la autora, Ashley Audrain, juega con nuestra mente continuamente. Con escenas de Blythe y su hija Violet que escapan a lo natural en lo referente a una madre y una hija. En esta historia vemos lo delgada que es la línea entre lo que podemos sentir, pensar como normal, y lo que vemos que se escapa a nosotros, que nos parece una aberración. ¿Cómo siendo sólo un bebé, una madre puede pensar que su hija es malvada? Pero las acciones que la pequeña Violet realiza así lo parece, aunque la relación que se nos muestra con el padre, nos dicen todo lo contrario. Estamos continuamente en un tira y afloja, en un partido de tenis, intentando descifrar que parte es real, ¿todo? ¿nada?. Hasta el final, justo hasta la última página, estaremos en esa duda continua.
Quizá haya partes de la historia que se me hayan quedado algo flojas, algo repetitivas, pero aún así la autora sabe mantener en todo momento el ansia por leer y saber qué va a pasar.
«El instinto» es una novela entretenida y diferente que nos hará pensar sobre las cuestiones más personales del ser humano.

Soy 100% Gellidista, así que en cuanto me entere de la nueva novela de César Pérez Gellida, no dudé en empezarla.
«La suerte del enano», es una novela muy César. Con esto quiero decir que su toque negro y bélico lo tenemos presente en varios capítulos. Como nos tiene acostumbrados, está relacionado con la historia de los personajes que nos vamos encontrando. Algunos detalles son importantes para saber la historia, y saber como han llegado a la situación actual. En mi caso, no soy muy aficionada a esta temática, pero al igual que en sus novelas anteriores, me ha dado la pizca de curiosidad justa para que no me resulte tedioso. Aunque quizá en otros lectores, puede resultar excesivo.
Si primero he dicho que «La suerte del enano» es una novela muy César, también es de recibo decir que me ha sorprendido por que está también alejada de la temática de sus otras novelas.
En «La suerte del enano» no vas a encontrar escenas tan grotescas como en sus otras trilogías. Es una trama sobre un robo en un museo muy bien hilvanada, pensada y detallada. A mí me ha sorprendido y ese pequeño cambio de registro me ha gustado mucho.
Aunque podemos considerar que «La suerte del enano» es una novela independiente, tenemos personajes de sus otras trilogías. Y durante la lectura, encontramos también referencias a situaciones pasadas, otros personajes o escenarios. No es necesario haber leído las otras, pero yo os diré que es recomendable y que lo vais a disfrutar más.
Los nuevos personajes, me han resultado muy especiales, como el llamado «Espantapájaros». Y alguno de los nuevos, o no tan nuevos, puede que den mucho más juego en un futuro. Aunque reconozco que me gustaría leer más sobre Sara, Sancho y compañía, me gustaría leer a César Pérez Gellida con unos personajes nuevos y completamente diferentes.
El escenario vuelve a ser Valladolid, ciudad natal de César y que una vez más nos demuestra que conoce al dedillo, y leyendo «La nota del autor», vemos lo que se implica hasta conseguir lo que quiere.
En resumen, «La suerte del enano» es una novela negra que, si te gusta el género y los tintes bélicos, no puedes dejar pasar.

Me encanta como escribe María Reig, es un placer leerla. Después de leer su primera novela, papel y tinta, no dudé de leer su nueva novela. Se me han pasado sus páginas volando.
La manera que tiene de narrar, es muy descriptiva y detallada. Parece que estés en el St. Ursula con las chicas, escapándote después del apagado de las luces, o en el pueblo de excursión con los chicos. Parece que en cualquier momento vas a escuchar el ruido de los aviones de la guerra.
Me ha sorprendido la época que ha elegido para desarrollar la novela, ya que lo hace desde otro punto de vista al que estamos acostumbrados de leer en otro tipo de novelas.
Los personajes son muy completos y bien desarrollados. Sara y George me han encantado, con esas escapadas y clases secretas, esa inocencia de la juventud.
La intriga por saber que pasaba, por ese relato que se narra años después, con los internados, el cierre del St.Úrsula, los profesores… todos tienen algo que ocultar, nos mantiene adictos a la lectura y no pararemos hasta finalizar el libro.
Me ha sorprendido y gustado a partes iguales, deseando leer la próxima novela de María Reig.

Leer a Stephen King siempre es un placer, así que he disfrutado mucho de la lectura de «La sangre manda».
«La sangre manda» está compuesto por 4 relatos que tienen en común el misterio. Quizá no se los puede denominar de terror, pero sí thriller, de misterio sobrenatural, extraño, psicológico. De ese que nos mantiene pegados a la lectura hasta que descubrimos lo que se esconde detrás. Ese misterio que se nos mete en el cuerpo, y nos hiela la sangre, que juega con nuestra cabeza… ese misterio tan Stephen King, que o amas, u odias.
El primero, «El teléfono del señor Harrigan» nos narra el poder que la tecnología ha ido teniendo sobre nosotros. Conectados a internet, smartphones y los cambios que ha habido en la red. Pero además, nos trae la historia de Craig y del señor Harrigan y podríamos decir del poder de la superstición, de la comunicación con el más allá a través de las nuevas tecnologías. Me ha gustado además la relación entre el curioso señor Harrigan y el pequeño Craig, y como ha ido creciendo y la importancia que ha tenido para Craig siempre.
«La vida de Chuck» es el segundo relato. El mundo está llegando a su fin. Las ciudades se hunden, internet, móviles y televisores están fallando, y hasta las estrellas se están apagando. Pero un mensaje misterioso ha salido por toda la ciudad «Charles Krantz. 39 magníficos años. ¡Gracias Chuck!», pero nadie parece saber quién es Chuck, ¿estará relacionado con lo que ocurre, con el fin del mundo?
El tercer relato es el que da nombre al libro «La sangre manda». Antes de nada, especificar, que si no las leído el libro de King de «El visitante», no leas este relato, ya que trata sobre lo mismo y te harás un tremendo spoiler. Creo que esto es algo que se debería de haber avisado, ya que en mi caso no lo había leído, y me he destripado parte del libro. De igual manera, la protagonista, Holly, sale en la trilogía de «Mr. Mercedes», pero en este caso sólo descubrimos que es una investigadora un tanto peculiar, no destripa nada de los libros. En «El visitante», sale también Holly y otros de los personajes de este relato por lo que recomiendo que lo leas antes.
Y ahora, centrándonos de nuevo en el relato, empezaremos diciendo que es el más largo de los cuatro que componen el libro. A mí me ha gustado mucho y me ha mantenido en tensión toda su lectura, me ha creado angustia ciertas partes relacionadas con el visitante.
El último relato, «La rata», nos trae a Drew, un escritor de relatos que un buen día tiene una idea para un libro. Para llevarla a cabo, decide irse a una antigua cabaña aislada en El Camino de Mierda, que pertenecía a su padre. Una buena tormenta, un extraño resfriado y la aparición de una rata le harán pasar muy malos momentos… ¿o todo está en su cabeza?
En definitiva, «La sangre manda» nos hará pasar muy buenos momentos con su lectura y hasta se nos harán cortos los relatos.

Lo primero, creo que es de recibo felicitar a la editorial Suma de Letras por la elegancia en esta edición. Tapa dura con sobrecubierta brillante, me recuerda a los papeles de regalo de brilli-brilli, todo un acierto.
Cuando tienes en tus manos «Elevación» de Stephen King, no sabes lo que vas a encontrar, ya que además la sinopsis tampoco nos da muchas pistas.
Sólo que nuestro personaje principal, Scott, se da cuenta de que sufre un raro fenómeno: pierde peso. No adelgaza, ni se le nota físicamente, pero cada día que se pesa en la báscula descubre que ha perdido peso. Además de que es cómo si tuviese un campo de gravedad 0 a su alrededor, ya que aunque coja una silla y se pese con la silla, su peso no varía. Scott no sabe que le ocurre, pero sí que tiene claro que no quiere volverse una atracción de feria ni un experimento humano. ¿Que pasará cuando llegue a peso 0?
No se puede decir mucho más sin destripar la novela, ni sin decir nada clave de ella. Solamente hay que leerla y dejarse llevar por el autor.
Algo que me ha gustado también, es que en la novela encontramos pequeños guiños a otras de sus novelas, como mi adorada IT y Pennywise, entre otras.
Además al principio de cada capítulo, tenemos una pequeña ilustración sobre lo que nos vamos a encontrar en su lectura. Son pequeños detalles que gustan de encontrar mientras se lee.
«Elevación» es algo muy diferente a lo que King nos tiene acostumbrados. Yo me la he leído en dos ratos, y es de esas novelas que se disfrutan leyendo y da pena acabarlas. Su lectura es ágil, atrapa y con poco, nos transmite mucho. Me gusta mucho esta parte del autor, ni terror, ni thriller, algo nuevo y que recomiendo, ya que no te va a dejar indiferente.

La Torre de la encrucijada es de esos libros que nada más empezar, te atrapan y ya sólo piensas en qué pasará y en poder seguir leyendo en todo momento, aunque sean dos páginas más, pero no podremos parar a cada rato libre que tengamos.
Si no fuese por edición anticipada, creo que no me habría animado a leerlo, y la verdad que sería una pena ya que me ha encantado y lo recomiendo muchísimo.
Es una historia preciosa, misterio mezclada con fantasía, con mucha fantasía. La historia se vive, cada página y cada detalle lo vemos claramente. Está narrado de una manera muy cómoda de leer y amena, que a pesar de que los capítulos son largos, se nos hacen cortos. A mi me ha recordado a una mini serie de TV, y creo que la idea funcionaria muy bien.
Son 576 páginas, pero que a mi se me han pasado en un periquete, y además me ha dejado con ganas de seguir leyendo, otras 576 páginas sin problemas. Ojalá que pronto sepamos más de nuestros amigos investidos.
La historia comienza un poco rara, tanto que al principio en mi caso era reticente a que me gustase. Pero por suerte el autor, David Pulido, pronto consigue llamar nuestra atención con el anuncio de la búsqueda del piso: en el centro de Madrid, grande, para un solo inquilino, entrada a vivir ya, y por sólo 204e ¿todo un chollo?. Eso pretenden descubrir nuestros protagonistas, aunque pronto vemos que el anuncio del piso no es solamente lo raro en esta historia. Y esa curiosidad que tienen los inquilinos de la famosa Torre de la Encrucijada, es la misma que tendremos nosotros para no parar de leer.
Los personajes me han gustado muchísimo Muy diferentes entre sí, al que más al que menos le coges cariño, o le odias, pero pronto cambias de opinión y juegan mucho con nuestros sentimientos e imaginación.
Me ha dejado con una sonrisa en la boca cuando lo he terminado, es de esos libros que sigues pensando en ellos tiempo después de acabarlos.

Es lo primero que leo del autor Ibon Martín y desde luego que no va a ser lo último ya que me encanta como escribe.
La danza de los tulipanes es de esas novelas que empiezan fuerte, de tal manera que soltamos un «guauuuu», y desde ese momento, ya no podemos parar de leer. El resto de la historia, tiene buen ritmo, nos va dando pequeñas semillas y detalles para que pensemos y en todo momento queramos leer más y más, para ver si nuestras sospechas son correctas. En mi caso tenía 3 sospechosos… y aunque acerté con uno de ellos, me ha sorprendido el final.
La historia se centra en la zona de Gernika y Urdaibai, lugares muy bien descritos y que te deja con el gusanillo de ir a conocer. Además de mencionarse también la famosa roca dragón, lugar de la famosa serie de Juego de Tronos que seguro más de uno conocemos. Por proximidad, seguro que algún día me escapo para ver los escenarios de la novela 🙂
La narración es muy fluida, fácil de leer y algunos capítulos cortos ayudan a que su lectura sea más rápida. Nos narra el presente, la investigación policial, con los asesinatos y todo lo que implica. Además, nos intercala unas pequeñas pinceladas, del pasado del que suponemos nuestro asesino, escenas que en más de una ocasión me han dejado los pelos de punta, hasta tal punto que no sabía que tenía más ganas de leer, si el presente o el pasado.
Los personajes tienen mucho poder, se podría decir que principales tenemos 3, contando al asesino. Pero el resto de igual manera tienen un papel muy importante, no son los que, al menos para mí, podríamos considerar secundarios, ya que están muy presentes en todo momento.
El final, nos queda el buen sabor de boca, de que quizá en un futuro (espero no muy lejano), sepamos algo más de nuestros amigos de la Unidad Especial de Homicidios de Impacto. Yo lo estoy deseando.

«Sí, si es contigo», es un libro que nos llama la atención nada más verle. La portada es llamativa, en blanco y negro, y las letras en un rosa flúor a juego con el lomo que no pasan para nada desapercibidos.
Además, al abrirlo, vemos que tiene páginas en blanco, negro, y varios tonos grises. Algo muy original aunque recalcaré que algunas páginas de las negras/grises, se hacen algo más difíciles de leer.
El motivo del cambio de color, es el cambio de narración. La novela está contada por nuestras dos protagonistas, D y M, y a cada una la corresponde un color: Blancas para D, negras para M. De igual manera en cada páginas viene arriba la inicial de la narradora para que no nos perdamos.
Y es que la inicial es todo lo que conocemos de ellas, en ningún momento sabemos el nombre completo, ni apellidos ni nada. Y la verdad que la historia puede pertenecer a cualquier pareja, por lo que dejar los nombres en el aire es algo que me ha gustado mucho.
La manera de contar la historia es muy amena, alterna los relatos «presentes», con lo que cada una lleva escrito en su diario, y va saltando de una a otra depende del momento, así que vemos el punto de vista y sentimientos de cada una.
D y M se conocen por casualidad, en un cine antiguo. Y por casualidad se vuelven a encontrar después. Y por casualidad a partir de aquí empieza una amistad que se transforma en mejores amigas y que posteriormente sin ellas mismas saber qué ha pasado provoca que se enamoren.
Me ha parecido una historia preciosa, llena de sentimientos, de momentos mágicos, y por desgracia también de momentos muy duros. En un momento dado incluso para ellas es difícil aceptar lo que sienten. Posteriormente contarlo y provocar que sea real, que sean libres. Pero más difícil es ver cómo la sociedad en algunos momentos no lo aceptan, intentan separarlas. Incluso los familiares, aunque al final acaban entendiendo que el amor no distingue entre géneros, que lo importante es que se quieran, se apoyen, se respeten, se ayuden, y que la una a la otra se hacen bien por el simple hecho de estar juntas y quererse. El amor es mucho más.
Una novela que recomiendo sin duda.

Empecé este libro con muchas ganas, la sinopsis es muy llamativa y no dude cuando le ví disponible en Edición Anticipada. Pero al final me ha desilusionado un poco.
Comenzamos descubriendo que alguien ha preparado 7 lápidas con nombre en un cementerio de Nápoles. Ya ha aparecido el primer muerto de la primera lápida, por lo que los 6 restantes se preparan para esconderse, huir, o hacer frente al que comienzan a conocer como el Destripamuertos.
Michele, cuyo nombre lleva la última lápida, está en la cárcel. Tras veinte años encerrado, obtiene la libertad pero pronto va a descubrir que era mejor no haber salido nunca.
Fuera no le espera una vuelta fácil. Mucha gente quiere acabar con él, no sólo el Destripamuertos.
Vamos descubriendo poco a poco el pasado de Michele, con pequeñas pinceladas para ir encajando las piezas del puzzle del presente. Quién le quiere muerto, por qué, quién le ayuda, o le tiende una trampa… pesa mucho su pasado.
No es hasta el final del libro que todo cobra sentido y descubrimos quién es el famoso Destripamuertos, que a estas alturas ya se ha cargado a alguien más para ocupar esas lápidas.
Lo que es la historia, me ha gustado, ya que le da intriga y misterio, es lo único, saber quién era el Destripamuertos, y el ir sabiendo cómo iba a ir cobrándose las víctimas poco a poco. Si al final Michele iba a ocupar una o se iba a librar.
Pero, para mi, el resto de la historia es muy densa. Demasiados datos de mafia italiana, capos, trapicheos, drogas… me ha resultado en alguna ocasión hasta aburrido de leer. Estaba deseando pasar esa parte para seguir, y averiguar algo más de las lápidas y quien era el causante, aunque en algún punto me ha resultado predecible y no me he equivocado.
Al final le he terminado pero con esfuerzo, poco a poco, ya que había ratos en que no me apetecía seguir con su lectura.
Eso sí, está muy bien escrito y me gusta como escribe el autor, pero quizá para otro tipo de novelas me convezca más.

Leer a Paul Pen siempre es un placer y empecé con muchas ganas Un matrimonio perfecto y no me ha defraudado ni un poco.
Ya desde el primer momento nos engancha porque empieza fuerte y raro. Una chica en un carrito de comida rápida agarra un enchufe mojado y queda electrocutada. No sabemos más de ella hasta bastante después.
Un matrimonio con dos hijos, la familia ideal y perfecta como bien indica el título de la novela. Se mudan a la otra punta del país por algo misterioso que ha ocurrido y además pronto descubrimos que hay muchos extraños secretos de por medio. Nada puede ser tan perfecto y Paul consigue que te enganches a la novela por descubrir qué ha pasado realmente.
Cada personaje es muy peculiar, el padre que parece perfecto, la madre más de lo mismo y en plan happy todo el tiempo. La hija un poco pedante por su actitud de «mayor» y su manera de hablar. Quizá el más normal el hijo pequeño, o al menos tal y como lo refleja da más el pego de alguien real. Una familia muy curiosa que hacen que la novela tenga un toque diferente y bueno.
Es muy cómoda y amena de leer. Tiene pasajes muy angustiosos, en donde se me han puesto los pelos de punta y les he leído con mucha ansia. Es increíble como con una misma escena Paul Pen consigue en dos ocasiones que te quedes pegado al libro y que todo tu cuerpo se llene de escalofríos.
Pronto descubrimos en el infierno que se puede convertir una mudanza y un viaje en caravana que inicialmente era el sueño de toda la familia.
Aunque el final me ha resultado un tanto predecible, me ha gustado y le ha dado un giro un poco diferente a lo que me esperaba.
Quizá por la temática recuerda un poco a la típica película de los domingos en la comida, pero me ha gustado y entretenido mucho, la recomiendo sin duda.

No había leído nada de David B.Gil a pesar de que me habían hablado muy bien de sus novelas. Reconozco que me daba miedo comenzar con Ocho millones de Dioses por su extensión y su temática histórica. Y además de Japón, que inicialmente no es una cultura que me llamase la atención.
Pero después de leer la novela me ha cautivado totalmente. Las descripciones y costumbres son muy precisas, dan ganas de viajar y acompañar a Martín Ayala en la aventura.
Martin es un sacerdote que se formó en Japón, aunque ya no ejerce. El destino quiere que vuelva a este país a raíz de unos asesinatos. Nos vemos inmersos en esta investigación por descubrir que ha pasado.
La mezcla de thriller/novela negra hace que sea más llevadera la parte historica y que no sea especialmente densa. En mi caso lo he leído con mucha curiosidad y de una manera ágil. Reconozco que hay algunas partes mas densas que otras pero en ningun momento pierde ritmo.
La verdad que ha sido una grata lectura y seguro que me animo con mas del mismo autor.

Una novela que llama la atención por su portada en blanco y negro, un contraste muy bueno y por su frase de «no dejes las llaves de tu casa a cualquiera».
Bien escrita y muy amena de leer, engancha desde el primer momento y como los capítulos no son excesivamente grandes se avanza muy rápido.
La historia comienza narrada por la protagonista, Caroline, y nos va alternando el pasado con el presente. La base del presente es sencilla: un matrimonio con problemas que decide irse de vacaciones y para ello através de una página de intercambio de casas, se van a la casa de una desconocida y esta a su casa.
Respecto a la parte del pasado, nos va dando pinceladas para ir conociendo la situación de Caroline, del marido Francis y los problemas que han tenido.
Cuando llegan a la casa que van a ocupar durante una semana, empezamos a descubrir que algo no cuadra, y que de alguna manera está relacionado con el pasado que vamos conociendo.
A partir de aquí a mi me ha enganchado ya que aunque intuimos por dónde pueden ir los tiros, me ha provocado mucha curiosidad saber que misterio ocultan todos.
También nos encontramos con algún capítulo contado desde la perspectiva de Francis, el marido y algunos párrados del personaje misterioso.
El final me ha sorprendido ya que no es para nada lo que pensamos. Aunque en una parte me ha dado la sensación de que lo quería acabar ya y no sabía que otra opción darle para no hacer más enrevesada la historia.
De entrada me ha recordado a las típicas películas de los domingos por la tarde, las de la hora de la siesta. Que son sencillas, pero a la vez tienen un «algo», que hace que no cambiemos de canal. Lo mismo pasa aquí: sencilla y entretiene.
Lo único que no me ha gustado, es que durante todo el libro, leemos constantemente los pensamientos y sentimientos de Caroline, y en algunos puntos me ha resultado tedioso ya que se repiten, en el presente recuerda el pasado, en el pasado lo volvemos a leer; cómo se sentía respecto al marido, como se siente ahora, como recuerda que se sentía… así durante todo el libro. Esta parte tendría que haberla perfilado más para que no resultase tan repetitiva.
En resumen, recomendada para pasar un buen rato.