Fue mi audiolibro favorito del 2018, eso lo dice todo.

Inicié esta audiolectura a finales de noviembre en formato audiolibro y al menos en español debo destacar que la voz narradora me cautivó, imagino a la propia Michelle narrando su libro y QUIERO.

Recuerdo que una de las primeras frases que escuché, parafraseando, era algo como: “durante el tiempo que estuve como primera dama conocí a muchas buenas personas, pero también conocí a muchas personas hipócritas”, con esa frase literal me terminó de enganchar. Supe que Michelle era de naturaleza honesta, firme, que es una mujer que dice las cosas como son y no se deja intimidar por los demás.

Pude conocer la relación con su hermano, sus padres, abuelos, tíos; en general sus lazos familiares eran estrechos y queda claro que eso influyó en la formación de su carácter.

Me divertí escuchando sus anécdotas de cómo aprendió a tocar piano, los simulacros de evacuación que desde niños organizaban ella y su hermano en casa junto con sus papás, la ocasión en que se peleó en la escuela. Me asombré cuando supe de aquella vez en que ella siendo una niña de entre ocho o diez años le exigió a su maestra que se esforzara por preparar las clases y si no le gustaba enseñar, tal vez debería buscar otro trabajo en lugar de ser maestra. Aclaro, en ningún momento sonó como una niña petulante, simplemente era una niña que se daba cuenta que estaban estancados en cuanto a la enseñanza y ella quería aprender más.

Fue un poco triste el conocer las situaciones por las que atravesaron ella, sus familiares, vecinos y amigos solo por el hecho de ser personas de color. Michelle desde pequeña tuvo que aprender a lidiar con discriminación racial y ello también le llevó a que naciera el deseo de poder contribuir para cambiar esa realidad.

Ahora llegamos a la parte en que Michelle y Barack se conocen, inserta grito fangirl. No quiero decir mucho de esto para que lo lean por ustedes mismos MUAJAJA, solo diré que sí son bien goals. En mi opinión, la relación entre ellos desde el inicio se dio de una manera natural, sincera y bonita. Conforme el libro avanza conocemos las etapas por las que pasaron: cuando se casaron, cuando fueron padres por primera y luego segunda vez, cuando él entró a la política y cuando después empezó a rondar por su mente el postularse como candidato a la presidencia. Una de las cosas que sí quiero destacar de la relación de Michelle y Barack es que ambos respetaban las decisiones, metas y sueños del otro. No se cortaban las alas, se dejaban ser y se apoyaban. La neta sí soy bien fan de ellos.

Tuvo la oportunidad de trabajar en algunos bufetes de abogados reconocidos, pero su deseo de contribuir a la sociedad la llevó a un primer trabajo en una OSC (Organización de la Sociedad Civil), y desde entonces procuró empleos enfocados en el tercer sector. En esta parte sentí que conectaba con ella. Hay demasiadas empresas que solo buscan duplicar y triplicar sus ingresos mes con mes, año con año. Tengo la fortuna y oportunidad de trabajar también en una OSC, y durante los últimos años he escuchado a personas cercanas a mí “aconsejarme” buscar un empleo diferente en el que obtenga una mayor remuneración económica, al menos hasta el día de hoy no pienso hacerlo. No cambio la satisfacción de ver con mis propios ojos cómo mi trabajo ayuda a otros. Hay demasiadas personas solas pasando por diferentes situaciones difíciles, creo firmemente que todos podemos hacer más para ayudar en nuestro entorno cercano. Como primera dama de USA, Michelle siguió conservando esa convicción de ayudar, y lo sigue haciendo.

Probablemente piensen que al leer este libro van a conocer muchos secretos de cómo es vivir en la casa blanca, obviamente sí hay anécdotas al respecto, pero la esencia de Michelle no cambia al convertirse en la primera dama, y eso me gustó mucho. Los Obama pasan de tener una vida normal, a ser ahora el centro de atención de todo un país, e incluso países, y eso aterraba a Michelle. Ella quería que su familia conservara la normalidad lo más que pudieran y se esforzó porque fuera de esa manera.

En la parte final del libro habla un poco del cambio de la presidencia de Obama a Trump inserta música de suspenso. Como lo dije al inicio de la reseña, Michelle es honesta, no se deja intimidar por los demás y dice las cosas como son.

En súper resumen: lean Mi Historia. Vale mucho la pena.

Ps. Estoy considerando seriamente comprarme el libro en inglés (dato curioso, tengo entendido que incluye imágenes) porque quiero leerlo nuevamente y marcarlo.