Siento mucho no poder escribir la reseña de este libro, pero hace ya un mes desde que lo solicité y aún no lo he recibido. Es una verdadera pena porque tenía muchas ganas de leer algo de la autora y me parecía que esta era una muy buena oportunidad.

– SINOPSIS –

La periodista Gina Kane recibe un correo electrónico de una tal «CRyan» describiendo la «terrible experiencia» que vivió mientras trabajaba en la famosa cadena de noticias REL News. «Y no me pasó solo a mí», afirma. Gina intenta ponerse en contacto con Ryan, pero, cuando esta no responde a sus mensajes, descubre que la joven ha muerto en un trágico (y extraño) accidente.

Michael Carter, un abogado que trabaja para REL News, se encuentra en una situación muy incómoda: varias empleadas han sufrido acoso sexual por parte del presentador estrella de la cadena, y ahora Carter tiene que comprar su silencio. Es una estrategia arriesgada, pero, si juega bien sus cartas, podría acabar haciéndose rico.

Con la fecha de salida a Bolsa de la empresa cada vez más cerca, los intentos de Carter de impedir que el escándalo se haga público son solo comparables a la férrea determinación de Gina Kane de conseguir que todo salga a la luz. Sin embargo, tras la aparición de nuevas víctimas, no tardará en darse cuenta de que alguien está dispuesto a casi cualquier cosa para mantener la verdad en las sombras…

Esta es una historia de amor, aunque también es una historia de dolor y miedo. Es una historia sobre los recuerdos que se evocan y de la importancia de vivir la vida al máximo porque nunca sabes cuándo puede terminar. Este libro ha llegado a mi vida en un momento clave, y es que me ha hecho sentir emociones muy intensas que están ligadas a experiencias un tanto negativas que estoy viviendo actualmente. No puedo decir que esté experimentando lo mismo que la protagonista, pero me he visto a mí misma reflejada en sus emociones, en un sentido metafórico.

No puedo hablar mucho sobre la trama porque estaría estropeando el libro a todos aquellos que quieran leerlo, así que me limitaré a decir que es una historia muy triste y desgarradora, pero a la vez también reveladora, y que tiene el poder de darte la energía necesaria para continuar. En menos de doscientas páginas, Manuel de Lorenzo consigue narrar una historia de manera sencilla pero muy evocadora y bella.

Para mí el punto negativo de este libro es que no he sido capaz de empatizar demasiado con los personajes. Quizás lo he hecho un poco más con Lucía, pero sobre Julián tenía la impresión de que no sabía nada de él. Creo que me ha faltado un poco más de introducción y desarrollo de los personajes. En ese sentido el libro se me ha hecho muy corto. También tengo que reconocer que el punto clave de la historia me ha dejado algo desconcertada, pues hay un salto temporal demasiado grande. Entiendo que quizás esto no sea tan importante en la historia como lo son los sentimientos que lo rodean. Sin embargo me hubiera gustado que el autor se hubiera detenido un poco más. El final también me ha parecido bastante precipitado.

En general Todo lo demás era silencio, es un libro que me ha gustado y que he devorado en un día. Tengo claro que seguiré de cerca la trayectoria de este autor, porque creo que ha hecho un muy buen trabajo con su primera novela.

No sé ni por dónde comenzar a escribir esta reseña. En primer lugar tengo que decir que este libro a simple vista parecía un thriller, pero la verdad es que está más cerca de ser un drama que otra cosa. En esta historia seguimos a un matrimonio que tiene problemas de pareja y que decide intercambiar su casa con una persona desconocida. En esa casa, Caroline comienza a descubrir cosas que le son familiares y que le recuerdan a un suceso que tuvo lugar hace años. Es como si la persona con la que han intercambiado hogar conociera su secreto. Y esa es la premisa de la que parte el libro.

Aunque la idea de partida es buena, no es suficiente. En la práctica, la autora no ha sabido llevarla a buen puerto, lo que ha dado lugar a una trama muy plana y que no se sostiene por ningún lado. A parte de esto, los personajes me han resultado inverosímiles, desesperantes y con una personalidad nula. A esto se le suma el estilo narrativo de la autora, que es extremadamente simple, lo que hace que el libro sea muy aburrido. En cuanto al final, está muy cogido con pinzas. Es cierto que sí existe una cierta intriga por saber quién ocupa la casa de los protagonistas, pero la resolución me ha dejado indiferente.

En fin, ha sido una tremenda decepción.

El Niño en la Nieve forma parte de una serie de libros escritos por Samuel Bjørk y que tienen como protagonistas a los detectives Holger Munch y Mia Krüger. Yo me lancé a leer este sin haber leído los dos anteriores, principalmente porque no sabía que se tratara de una saga, y lo cierto es que, aunque se puede leer perfectamente como libro autoconclusivo, sí que he sentido en ciertas partes que me faltaba información. El autor se esfuerza en darte los datos claves de los libros anteriores para entender toda la historia, pero para mí no ha sido suficiente. Es por esto por lo que recomendaría leer los libros en orden de publicación (Viajo Sola, El Búho y El Niño en la Nieve).

El inicio del libro me pareció un tanto abrumador, pues el autor introduce multitud de personajes de una manera muy seguida y casi no me daba tiempo de asimilar quién era quién. El narrador es en tercera persona y va siguiendo a todos y cada uno de los personajes involucrados en la historia, desde detectives y testigos, hasta sospechosos. De esta manera contamos con muchísima información, lo que nos permite ir generando nuestras propias teorías. Uno de los puntos negativos que para mí tiene el libro, es que hay demasiados personajes, algunos incluso sólo aparecen durante un capítulo y no se vuelve a saber más de ellos. Es como si el autor quisiera jugar al despiste con el lector introduciendo personajes que no tienen relevancia para el desarrollo de la historia ni la resolución del caso.
También, hacia el final tenía la impresión de que me había perdido algo porque no entendía muy bien lo que estaba pasando. Hasta tuve que leer varias veces una misma escena porque no me quedaba clara (Esto quizás sea más problema de la traducción que del autor). La resolución del caso no me ha terminado de convencer y es que me ha resultado muy aleatoria y además bastante cliché.

Sin duda, para mí el punto fuerte de esta historia es la manera en la que está contada, pues te permite sumergirte en los pensamientos de los protagonistas. Casi sientes que estás invadiendo su privacidad.  Más en concreto con el personaje de Mia, Bjørk muestra su flujo de pensamientos, cómo estos se van enlazando. El lector puede ser testigo de la capacidad de análisis del detalle que realiza Mia. Se aprecia el torrente de pensamientos, y cómo esta va uniendo todas las piezas del puzzle.

En general, El Niño en la Nieve es un libro que aunque me ha gustado, me ha sabido a poco. El caso que se presenta es interesante, pero creo que se le podría haber sacado mucho más partido. Los protagonistas pierden fuerza a medida que se suceden las páginas, y la resolución del caso me ha dejado bastante fría. Quizás le dé una oportunidad a los dos libros anteriores, porque tengo entendido que son mucho mejores que este.

Bajo un Cielo Escarlata es la historia de un joven italiano cuya vida empieza a quebrarse al ser obligado a alistarse en el ejército alemán, en la Segunda Guerra Mundial. Lo más sorprendente de todo esto es que nos encontramos ante una crónica basada en hechos reales, y es que una vez más, la vida nos enseña que la realidad a veces supera la ficción. Sabiendo esto, es imposible que una historia de estas características pueda pasar desapercibida. Como bien explica el autor en el prólogo del libro, poco son los datos que se conocen sobre la Segunda Guerra Mundial en Italia, una historia que parecía olvidada, y que resurge de sus cenizas con este apasionante y emocionante relato. 

En primer lugar me gustaría destacar el enorme trabajo de investigación que el autor, Mark Sullivan, ha tenido que llevar a cabo para escribir este libro. Ya no es sólo contar con el punto de vista del propio Pino Lella, sino que además, recurre a diferentes fuentes, tanto oficiales como no oficiales, para asegurarse de que aquello que nos cuenta es verídico. Así, nos encontramos ante un libro que es muy intenso y que genera unas emociones muy fuertes en el lector. En mi caso, tenía que parar de vez en cuando para asimilar todo lo que estaba sucediendo, y era entonces cuando recordaba que estaba leyendo una historia real y no podía evitar emocionarme. Se trata de un libro que contiene mucha acción y donde continuamente están pasando cosas brutales a la par que interesantes, no hay un minuto de descanso. 

En cuanto a los personajes, destacar sobretodo al protagonista, Pino Lella, un joven que fue obligado a convertirse en hombre por culpa de la guerra. Es sorprendente todo lo que consiguió, ya no sólo por amor a Anna, que es como nos han intentado vender esta historia, sino por amor a su país, a su familia, a sus amigos y a sí mismo. Como personajes secundarios vamos a encontrar al general Hans Leyers, a Mussolini o al cardenal Schuster entre otros. Quizás me ha faltado un poco más de profundidad en el desarrollo de los personajes secundarios, y también emocionalidad en el protagonista. Con esto me refiero a que me hubiera gustado saber qué pensaba y qué sentía Pino en muchas ocasiones. Aún así, es un personaje con el que es muy fácil empatizar.

El estilo del autor está bien, aunque tampoco destaca. Prácticamente se limita a contar la historia tal como es, y aunque él mismo nos dice al principio que había lagunas en la historia que ha tenido que enmendar con toques de ficción, no queda muy claro en qué momento esto ocurre. Quizás alguna nota a pie de página comentándolo hubiera venido muy bien. A pesar de ello, el trabajo tan enorme que este libro conlleva es digno de mención. 

En conclusión, Bajo un Cielo Escarlata es un libro que he disfrutado mucho y con el que me he emocionado. Para mí ha sido una experiencia muy bonita conocer la historia de este joven héroe. Lo recomiendo a aquellas personas a quienes les guste la narrativa histórica con toques de ficción, aunque es cierto que se trata de un libro que puede gustar a todo el mundo.

Con la llegada del frío, no hay nada mejor como leer un buen thriller, y este que hoy os traigo es una gran recomendación. La novela, ambientada en el Berlín de 1980, tiene como trama principal la búsqueda de un asesino en serie, en concreto de cinco menores. Viktor Lavrov, psicólogo criminalista del KGB, se unirá a Otto Bauer, inspector jefe de la Kriminalpolizei para dar caza a este asesino. Paralelamente, Viktor tendrá que hacer frente a su trabajo como agente de inteligencia y a las consecuencias que esto conlleva.

Tengo que reconocer que el inicio del libro me resultó bastante confuso, motivo por el que no le he dado la puntuación máxima. El autor utiliza muchos términos técnicos alemanes relacionados con la época, y para aquellos que no estamos muy familiarizados con ellos nos dificulta la comprensión del comienzo. Esto sólo ocurre al principio, porque una vez que se entra en materia, resulta más fácil seguir la historia. También, los cambios de perspectiva del narrador acompañan a todo el libro, pero el lector se termina acostumbrando con el paso de los capítulos. Otra de las razonas por las que no he podido otorgar a este libro la máxima puntuación es que no he llegado a comprender la trama que corresponde al trabajo de Viktor como agente de inteligencia. En mi opinión es una historia que no tiene mucha relación con la trama principal y que puede llegar a dificultar y enlentecer la lectura. Si ya de por sí el libro tiene bastantes páginas, creo que esta historia podría haberse omitido para hacer la lectura más ágil y dinámica. Pero repito, esto es una opinión personal y no quiere decir que esta trama esté mal escrita o esté fuera de lugar.

A grandes rasgos, la trama principal del libro me ha gustado mucho. Aborda la hematodixia o vampirismo como tema principal y me ha resultado muy interesante poder conocer esta parafilia. Desde el principio, el lector también tiene la oportunidad de seguir al asesino y así puede conocer su método. Lo que más me ha gustado es que el libro tiene muchos giros y un final totalmente inesperado, que es lo que suelo buscar en una novela de estas características.

En cuanto a los personajes, a mi parecer quedan todos muy bien caracterizados. Me ha gustado que el autor destaque el lado humano tanto de Viktor como de Otto, y de esa manera hacerlos más creíbles. Sin duda, los protagonistas son muy complejos y deben luchar día a día con las sombras de sus correspondientes trabajos.

Para finalizar, creo que el autor ha hecho una gran labor de investigación y documentación, y ha creado una ambientación espectacular. Las descripciones de los lugares nos trasladan rápidamente a los escenarios donde se desarrolla la historia

En conclusión, Todo Lo Mejor me ha parecido una gran novela negra que contiene misterio, intriga, giros en la trama y un final que te sorprenderá.

Comencé con el libro en formato audiolibro, pero al cabo de un tiempo tuve que hacerme con su formato digital puesto que en audiolibro me resultaba muy difícil seguir la historia. Se trata de un libro que, como comentaré con más detalle posteriormente, alterna constantemente el tiempo en el que está narrada la historia; además tiene bastantes personajes y la trama en sí es algo compleja. Cuando leo un libro de estas características, me gusta tomar apuntes y poder desplazarme por el libro fácilmente, es decir, poder consultar cosas que ya han sucedido para resolver dudas que puedan surgirme. Con el audiolibro, esto es una tarea muy difícil, y dada la complejidad con la que está narrado el libro, pues existía cierta incompatibilidad.

Dejando a parte el formato del libro, me centraré ya en desarrollar la historia en sí. En primer lugar, el libro está narrado por varios personajes y va alternando el año 1994 con el año 2014. De esta manera, se producen muchos saltos en el tiempo que pueden hacer algo compleja la lectura al principio, pero el lector se irá adaptando poco a poco a esta forma de contar la historia. También hay que destacar que el libro está muy bien estructurado, de tal forma que no hay nada que se deje en el tintero, todo queda perfectamente claro. Hacia la mitad del libro, este se vuelve un poco monótono, a mi parecer hay algunos capítulos que están de relleno. En mi opinión, he de decir que llegó un momento en el que la lectura se me estaba haciendo un poco tediosa, y es que el libro tiene bastantes páginas y creo que quizás podría haberse resumido un poco más. 

En cuanto al argumento, Joël Dicker me ha parecido un autor que ha sabido mantener la tensión y el misterio a lo largo de todo el libro, y eso es bastante complicado de conseguir cuando uno se enfrenta a más de quinientas páginas. Tiene una exquisita capacidad para dejarte en vilo al final de cada capítulo, lo que hace que no puedas dejar de leer. Hay ciertos aspectos relacionados con la resolución del caso que a mi parecer no tienen una explicación del todo lógica. También, en un determinado momento me dio la sensación de que la historia tenía un cierto vacío, no me refiero a que fuera predecible, si no que hay un detalle que el autor quiere que pase desapercibido, pero resulta un tanto llamativo. Hacia la segunda mitad del libro, hay muchísimos giros argumentales, y el final es de infarto. 

El desarrollo de los personajes es magnífico, y dada la cantidad de personajes que hay, es algo a valorar muy positivamente. En esto me ha recordado a los libros de Agatha Christie, que tienen tantos protagonistas y donde todos son sospechosos en algún momento de la historia. Todos estos personajes son introducidos con una gran precisión, y de ellos se conoce prácticamente todo: sus pensamientos, motivaciones, historias pasadas, etc. Esto hace que el lector pueda jugar sus cartas y establecer sus hipótesis sobre quién es la persona culpable.

Por último, el estilo del autor me ha sorprendido mucho. El libro está narrado con una sencillez y una elegancia exquisita. También los diálogos son algo a destacar, ya que encontraremos conversaciones entre los personajes que son bastante profundas. La única pega que puedo poner al autor en este punto, es que a veces es demasiado descriptivo y entra en detalles que no son demasiado relevantes para la historia. Esto provoca que el libro se alargue más de lo que debería. 

En conclusión, se trata de un libro brillante y con una historia desgarradora, que he disfrutado enormemente y que ha conseguido sorprenderme. Estoy segura de que los amantes, y no tan amantes, del género de la novela negra disfrutarán al igual que yo. Me queda como asignatura pendiente seguir leyendo y descubriendo a este autor.

El Color de la Luz es una novela de la joven autora Marta Quintín. Se trata de una novela de corte romántico ambientada en diversos tiempos y lugares (España, Nueva York, París…).

La historia transcurre cuando una periodista (de quien no se conoce el nombre) asiste a una subasta de un famoso cuadro. En ella, una anciana, Blanca Luz Miranda, se hace con él por un valor de 20 millones de dólares. La curiosidad de la periodista la llevará a investigar acerca de esta singular mujer. Tras una larga búsqueda, finalmente consigue una entrevista con ella. A pesar de no empezar con buen pie, dará lugar a una jugosa oferta que la reportera no podrá dejar pasar.
De esta manera, comienza el relato de Blanca Luz, donde viajaremos al pasado para conocer su historia y su relación con el cuadro que acaba de comprar. Allí, conoceremos su historia de amor en la casa de la calle Campana.

El argumento de la historia me ha parecido muy novedoso, y en el libro podemos encontrar dos historias diferenciadas. La que nos cuenta Blanca Luz a través de la periodista, y la realidad en la que esta última vive. El echo de que no conozcamos el nombre de la reportera, genera en el lector la apariencia de que se trata de sí mismo el que cuenta y vive la historia. Esto a su vez, da lugar a la idea de que realmente se conocen a los personajes de los que se está hablando, lo que hace que nos encariñemos con ellos y que el lector se sienta partícipe de la trama.

Por su parte, los protagonistas están muy bien desarrollados. La autora ahonda en la personalidad de cada uno de ellos, pudiendo llegar a comprender sus actos y pensamientos. Tanto es así, que la protagonista, Blanca Luz, me ha caído bastante mal a ratos. Te hace querer gritarle que las cosas se pueden hacer de otra manera, y consolarla en momentos duros.

En cuanto al estilo de la autora, se caracteriza por una excelente prosa y por diferenciar la forma de redacción en función de la época que tiene lugar. Esto es, para la época presente, utiliza palabras más actuales y desenfadadas; mientras que para la narración de la vida de Blanca Luz utiliza un lenguaje más formal y recatado.

No le he dado la máxima puntuación, ya que para mí la historia de amor que se relata dista mucho de ser amor realmente. Al leer el libro uno se da cuenta de cómo no se debe superar una ruptura por muy dolorosa que sea. Esa persecución que realizan los protagonistas a través del tiempo para encontrarse, quererse y luego abandonarse repetitivamente, para mí es un poco inverosímil, en el sentido de que una persona al someterse a una ruptura puede estar mal durante un año o dos (fase de duelo), ¿pero durante 20 o 40 años?. 

En conclusión, es un libro que merece mucho la pena leer. Está muy bien redactado y tiene unos personajes maravillosos con los que conectas y casi los sientes como tus propios amigos. Ojalá la autora continúe escribiendo porque sin duda posee mucho talento.