Al salir esta novela y conocer su sinopsis no pude resistirme a leerla, aunque primero decidí probar con sus otros dos libros pertenecientes a la tetralogía de la autora, en la cuál esta novela sería el tercero.
Si los dos primeros me enamoraron, este en concreto me encantó. Es un período histórico sobre el cual no suelo leer demasiado pero que me ha parecido la ambientación perfecta para la historia que se nos presenta.
Viajaremos a la Venecia del Siglo XVIII, en pleno carnaval y allí conoceremos a Arabella Massari, una joven enamorada con el carnaval de su ciudad y que será la anfitriona de la fiesta a la que acude como invitada Lucrezia, una joven tímida y reservada, hija de un empresario que quiere utilizar el matrimonio de su hija para prosperar. Por eso estará prometida a Roberto Manin, un hombre al que ella no desea y hará todo lo posible por romper ese compromiso.
Durante la fiesta Arabella y Lucrezia se conocerán y Arabella verá en la joven invitada, la persona ideal para unirse a la hermandad de la cuál forma parte. Una hermandad de mujeres hartas de pasar toda su vida en un segundo plano.
La historia me encantó. Llena de giros argumentales que no harán perder el interés. La pluma y el estilo sencillo de la autora me parecen perfectos a la hora de narrar y describirnos cada escena. Un novela que engancha desde el primer momento y que es un canto al feminismo y a la lucha por la igualdad.
Te hará sentirte una hija del agua y vivir la historia como si fueses una protagonista más viviendo cada intriga y aventura.
En definitiva, si los dos anteriores me gustaron, este pasa directamente a la lista de mis favoritos.

Otear el infinito puede ser una de las actividades más gratificantes y a la vez más desasosegantes. Tumbado en la hierba de un prado, sin contaminación artificial, puedes sentirte como el astronauta que ha salido a realizar una operación de mantenimiento de la nave, o como Dios el día que se dispuso a crear el universo, o como el más insignificante de los seres del más remoto de los mundos? 

No me digas que no suena tan maravilloso como inquietante.

De ahí que, considerar el espacio como escenario para una novela suponga ya de por sí un valor añadido que puede derivar hacia una historia de supervivencia, o existencialista, o de ciencia ficción y porque no?, hasta de amor.

El problema es que apenas empezamos a leer el asunto se asoma con fiereza a la tragedia. Los astronautas Carys y Max se quedan a la deriva, en un espacio que los acuna siniestramente entre sus negros faldones.

Que el tiempo es relativo allá arriba, ya lo sabemos. La saga de la odisea en el espacio de Arthur C. Clarke, que hace poco reseñé, ya abundó en esa idea de una línea temporal, tal como la conocemos, hecha trizas por un éter que poco entiende de leyes de un simple planeta azul.

Y si embargo Carys y Max saben cual es su tiempo allá arriba, en ese espacio negro de lejanos destellos y sin reloj alguno que lo rija.

Ellos disponen de oxígeno para 90 minutos? Como buenos científicos hacen sus cálculos rápidamente y alcanzan a dilucidar que juntos no tienen ninguna oportunidad de regresar al cálido refugio azul que se antoja cercano y lejano a un tiempo.

¿Cuál de los dos atronautas podrá tener esa oportunidad? ¿Por qué motivo iba a ceder uno en favor de otro su último soplo de vida?

Una historia romántica con varias historias de amor: Varias protagonistas comparten uno de esos pisos maravillosos de la Gran Manzana. Vistas a Central Park, al skyline y al fascinante horizonte newyorkino.
Una historia de amistad: Si un argumento puede ser más intenso que el amor (al menos en cuanto a emociones positivas), ese es la amistad. Hasta cuatro son las chicas que conviven en el mismo piso. Con sus pequeñas discrepancias solucionadas siempre con humor, lo verdaderamente relevante es cómo consiguen una penetración cautivadora en lo literario.
Una historia coral: Variedad en las dedicaciones y vidas de las cuatro chicas, Claire, Abby, Morgan y Sasha. Desde la escritora en busca del gran argumento que le permita su propio loft independiente en NY, hasta la ginecóloga en fase de aprendizaje hasta que pueda lanzarse al ejercicio autónomo, pasando por una financiera deseosa de su primer gran golpe en bolsa y el diseño de zapatos al que se dedica la protagonista Claire.
Así que la novela se prepara para ofrecernos un poco de todo, historias de amor diversas, momentos divertidos en el piso compartido y en alguna juerga por la gran ciudad, así como complicidad e instantes emocionantes de sinceridad y terapia.
Sin duda un acierto de Danielle Steel que cautivará a lectoras de romántico pero también a cualquier lector que quiera pasar un buen rato entre risas, amores y desamores, confidencias y la búsqueda de los sueños…

La villa de las telas me ha parecido una novela absorbente y muy entretenida gracias a su acertada mezcla de conflictos familiares, secretos y una estupenda ambientación a principios del siglo XIX. Una novela que te atrapa, que se lee con muchísima facilidad y que me ha encantado. Tiene un aire a la serie Downton Abbey.

Aunque la novela comienza con la llegada de Marie a la casa es una novela prácticamente coral aunque algunos personajes resalten más que otros. Todos muy bien definidos y ocupando su papel correspondiente. La protagonista, como ya os he dicho, es una muchacha huérfana e hija ilegítima que ha ido desde muy niña de un lugar a otro. No tiene demasiados datos de sus padres y representan una incógnita en su vida (su procedencia será una de los mayores y más interesantes misterios de la novela). Nadie ha querido hablarle de ellos. Con la llegada a la casa se siente afortunada a pesar de que alguno de los criados la trata de forma despectiva. Pero ella no se amilanará y hará prevalecer su voz y sus derechos.

Los Melzer son la opulenta familia para que la protagonista trabajará. Johann, el cabeza de familia, se dedica en cuerpo y alma a la industria textil. Tiene verdadera obsesión por el trabajo aunque esto no le impide mantener una buena y afectuosa relación con su esposa Alicia, de alta cuna venida a menos, que se dedica a dirigir a los criados y ser demasiado persuasiva con sus tres hijos. Son tres personajes con mucho peso en la novela. Paul, el mayor, estudia una carrera aunque prefiere divertirse en la capital derrochando el dinero de su padre. Y Elizabeth y Katharina tienen formas de ser completamente diferentes. Mientras la primera tiene un carácter fuerte, egoista e imperativo la segunda es una belleza lánguida y melancólica como su madre que sufre nerviosismo e insomnio. Por supuesto los criados también tienen sus propias tramas y están bien dibujados.

Celos, envidias, amores no correspondidos, pasiones ilícitas, amistad, lealtad, deseos de venganza, ambición son algunas de las emociones que mueven a estos personajes y las que van configurando las tramas de esta novela.

Como os decía el contexto temporal es de mis preferidos y es un punto que está muy bien logrado en la novela. Aunque la autora no se alarga en grandes ni pesadas descripciones veremos cómo se desarrollaba la vida día a día dentro de una familia burguesa en los primeros años del silgo XIX dándonos además ideas de sus rutinas y las relaciones tanto entre los criados como entre los señores y ambos, que creo que es lo que mejor puntualiza la autora. Pero también nos asomaremos a la sociedad alemana en general. Las fiestas y bailes, la preocupación de las jóvenes por encontrar un marido y la de sus padres porque estos sean de la posición adecuada (en esta época las diferencias entre las clases sociales estaban muy marcadas) o la importancia de no levantar escándalos y ser bien considerados entre otros muchos aspectos.

La familia vive de una fábrica textil y conoceremos a grosso modo cómo funcionaba y las condiciones abusivas para los empleados. Las maquinarias en ese momento estaban en pleno desarrollo y ya comenzaban a funcionar modelos más modernos y automatizadas. Pero también es un momento en que los trabajadores se estaban cansando de la explotación y comenzaban a pensar en esos derechos que sus patrones no les reconocían.

Y es una novela que a pesar de su extensión se me ha hecho muy corta y no me hubiese importando que hubiese continuado otras seiscientas páginas más. Aunque al final de la novela algunas tramas quedan resultas, otras de ellas quedan abiertas para continuar en la siguiente, que por supuesto estoy deseando leer. La narración en tercera persona es muy ágil y directa pero a la vez con suficiente detallismo para que nos imaginemos el mundo de los personajes y a ellos mismos a la perfección.

Lucinda Riley me parece una autora formidable. Todo lo que leo de ella me parece una maravilla, y no me canso nunca; la última serie que ha sacado la devoro días después de su publicación, no tengo paciencia por las ansias que tengo de saber y conocer más sobre la historia que nos trae en el libro. Estaba deseando leer la cuarta parte de esta serie de hermanas llamadas como las constelaciones de origen mitológico griego que nos cuentan su vida tras la muerte de su padre Pa Salt. En este caso, le toca a la cuarta hermana, La hermana Perla. La historia de Cece.

Tras la disputa con su hermana Star, Cece decide dejar Londres y trasladarse a Tailandia y posteriormente Australia para encontrar y conocer a su familia biológica gracias a la carta de su padre Pa Salt y a las coordenadas que le dejó antes de morir, y también quiere conocer quién y por qué le dejaron una herencia procedente de Australia. Tailandia será un punto de encuentro para volar hacia Australia aunque en el último momento decide quedarse en Navidades en las maravillosas playas de Phra Nang o Railay, al sur del país. Allí conocerá a Ace, un misterioso hombre que nadie conoce y que no se da a conocer, que le ofrece alojamiento gratuito y acompañamiento, y pronto descubren algo más personal entre ellos. Tras dejar Tailandia vuela a Australia para conocer por fin sus raíces: allí encontrará a una chica muy especial, Chrissie, que le ayudará en su afán de encontrarse a sí misma y a encontrar a su familia.

En la otra historia que tenemos en el pasado, conoceremos a Kitty McBride, una hija de un reverendo muy conocido en Edimburgo. Tras conocer un oscuro secreto de su padre se embauca en un larguísimo y duro viaje de dama de compañía de una acaudalada señora. Allí las recibirá la familia de esta y conocerá la vida del “otro” mundo. Tan distinta y diferente a la que ha vivido ella: el país de la perla, de la llanura solitaria, y de los aborígenes. Tras unas semanas conociendo a la familia: decide casarse con uno de los hermanos gemelos: Andrew, el gemelo más comedido, trabajador y no con el alocado y risueño Drummond. Tras casarse deciden irse a Broome, una ciudad peligrosa, donde ella encontrará varias razones para luchar y vivir.

Una doble historia tan atrayente como las anteriores. En esta ocasión viajaremos a Tailandia y Australia y conoceremos más a fondo su cultura y sus orígenes. Tailandia la recorreremos más bien visualmente, y seremos maravillados por unas espléndidas y mágicas playas y zonas totalmente reales que nos darán una visión completa de la simple y bella Tailandia. En cambio a Australia viajaremos de forma más compleja, más a fondo y mucho más cultural: la autora ha hecho un trabajo de documentación excepcional abordando temas tan interesantes como leyendas e historias aborígenes reales y el tema tan poco mellado como es el negocio de las perlas junto a su gran y real leyenda La Perla Rosada. Pero también como siempre Lucinda nos introduce un tema cultural y en este caso le toca al arte y su más fiel exponente e importante aborigen australiano será Albert Namatjira: nos cuenta parte de su historia personal y su legado artístico tan impresionante como genuino. En general el contexto histórico y social es espectacular abordando temas oscuros como el naufragio real de SS Koombana y la importante y seguida partida hacia Australia de niños británicos huérfanos, pero también y hechos que hasta hace poco ocurrían en Australia como son el robo de los hijos mestizos para culturizarlos en el ambiente occidente-australiano conllevando a una pérdida de las raíces a estos niños.

Los personajes son varios aunque las dos protagonistas son Cece y Kitty. Dos mujeres aguerridas, pero que en un principio parecen asustadizas y poco aventureras. Con el paso del tiempo y sus vivencias se van dando cuenta de su fortaleza, de su voluntad a cambiar las cosas. Cece era la hermana menos conocida, más apática, personalmente me parecía que podía dar mucho de sí, y aunque ha sido así, y tiene una evolución clara el final que le deja la autora no me deja con buenas sensaciones, me deja con dudas y no me termina de convencer del todo ya que queda demasiado abierto para mi gusto: deja en abierto el futuro de Cece, y cerraremos el libro sin averiguar qué ha elegido finalmente. En cambio Kitty me ha parecido un personaje soberbio y su historia (y la de sus acompañantes) me ha parecido impresionante, como lucha por su familia y amigos, como deja de lado el amor y finalmente a pesar de todo, consigue sobreponerse y seguir viviendo, aunque debo decir que he echado de menos también que la autora se explayara en el tema de la perla, que nos contara con mucho más detalle el trabajo y negocio que había en aquella época con las lujosas perlas.

Aunque ha habido cositas que no me han parecido acertadas como siempre la autora me envuelve en una lectura apasionante y maravillosa llena de secretos, de pasiones y de tragedias, pero siempre rodeado de descripciones mágicas, sorprendentes y llenas de optimismo. Con una narración de nuevo impecable, elegante y envolvente la autora consigue atraparnos en una doble historia con gran cantidad de documentación histórica y cultural verídica, con personajes reales, con una ambientación precisa y fascinante y rodeada de emociones y descubrimientos personales y sentimentales. Una serie (y en particular una novela), repito, increíble, bien escrita, con muchísimo misterio a su alrededor desde el minuto cero hasta el final (todavía no escrito), con muchísimas sorpresas y con historias que cautivan al lector y, de nuevo digo que me parece imprescindible leer y que no os podéis perder.

Tenemos que reconocer que Tú y yo nivel principiante por momentos nos recordaba mucho a otra saga similar que seguramente recordarás. 50 sombras de Grey. Aunque solo ligeramente. Pues a pesar de que esta novela también puede catalogarse dentro del género erótico, hay que reconocer también que es mucho más light. Por otra parte también cabe destacar que consiguió engancharnos desde el primer momento y dejarnos con ganas de más como ya nos pasara con la anterior.

El argumento no puede ser más atractivo. Un profesor con una vida ‘perfecta’ y rutinaria… Una alumna insolente, provocativa y descarada… Dos personas que a simple viste no encajan ni se complementa bien, pero que pueden aprender mucho el uno del otro. ¿Quién le enseñará más a quién? ¿Y en qué sentido?

La historia promete y no defrauda. La verdad es que hemos pasado un rato divertidísimo leyendo esta novela a ratos subidita de tono, a ratos llena de romanticismo, otros lacrimógenos a más no poder, y a ratos rebosante de risas y humor.

Yo no conocía a esta autora anteriormente, por eso quizás cuando empiezo un libro de alguien desconocido lo hago con mas miedo de lo normal.

Pero este libro me ha sorprendido gratamente ya que es una historia de amor un poco mas atípica y quien no sueña con ir por la calle y conocer a tu celebrity favorita y enamoraros?

Pues de eso trata este libro nos cuenta la historia de Natalie una joven, que un día caminando por la calle con su perro se encuentra con una celebrity super famosa, y el la lleva a un lado oscuro del cual ya no sabe como va a salir.

Esta historia te engancha, te consume, te lleva a terrenos muy profundos del amor y del deseo, y sobre todo no puedes parar de leer que es muy importante.

La verdad que me ha gustado mucho y si os van las historias de deseo, pasión y amor no se a que esperáis para leer este libro porque es muy bueno, y ademas tiene segunda parte en camino, así que aprovechad y dejaros llevar por el mundo de Flynn y Natalie.