Star D’ Aplièse se encuentra en una encrucijada tras la repentina muerte de su padre, el misterioso millonario Pa Salt, que ha dejado a sus seis hijas adoptivas una pista sobre sus orígenes.  Star, la más enigmática de todas, tiene serias dudas sobre la necesidad de arriesgarse a perder la seguridad que le brinda la estrecha relación con hermana CeCe. A la desesperada decide seguir la pista, una pista que la conduce a una librería de viejo en Londres y al comienzo de un nuevo mundo.

Hace cien años, Flora MaeNichol jura que nunca se casará. Contra su voluntad, se ve arrastrada a Londres hasta la casa de una de las personas más influyentes de la sociedad eduardiana: Alice Keppel, la amante más famosa de Eduardo VII. En este entorno, Flora se debate entre el amor apasionado y las obligaciones familiares al mismo tiempo que se siente como un peón en juego ajeno, cuyas reglas solo conocen otros. Sin embargo, el encuentro fortuito con un misterioso caballero le proporciona las respuestas que siempre ha esperado.

Estamos ante el tercer libro de esta saga y es asombroso ver como a través del tiempo conocemos las historias de todas las hermanas. En este caso le ha tocado el turno a Star, para mí, mi hermana favorita. Me ha parecido un personaje enigmático, lleno de misterios y siempre he querido descubrir porque tiene tanto miedo al mundo y decide vivir a la sombra de Cece. Por eso me parece que el título del libro es el más acertado para ella.

Como siempre nos encontramos con dos líneas temporales, la de Star y la de su antepasado. Gracias a esto podemos conocer la Inglaterra de Eduardo VII y sus costumbres.

Creo que lo que más me ha gustado del libro ha sido encontrarme con la decisión de Star de dejar a Cece. No me lo esperaba para nada, pensaba que su libro descubriendo su historia sería con Cece al lado, pero no. Además, como es mi personaje favorito, me parece que le da su toque personal de misterio, de no saber nunca que piensa realmente Star o lo próximo que quiere hacer.

En definitiva, tengo muchísimas ganas de leer ya el siguiente libro porque estas hermanas tienen mucho que descubrir y nosotros con ellas.

Kristin Hannah se ha vuelto a lucir creando esta historia que encierra tantos sentimientos, tantas vidas y tanto dolor que traspasan el libro y te hacen sentir parte en todos estos momentos. Es muy difícil poder explicar o describir lo que sientes al leer el libro porque son tantas cosas, para mí fueron tantos años, porque pase con estas dos jóvenes sus vidas desde 1974 hasta la década del 2000 y para mí en dos días pasaron todos y cada uno de estos años junto con ellas.

Temas como la autoestima, la familia, el amor, la amistad, la pérdida, los momentos en los que te replanteas tu vida completamente y sigues adelante todo esto es lo que nos podemos encontrar a lo largo de la historia.

De cada una de las chicas no puedo decir nada más que personas tan reales como yo y como cualquiera de nosotros. Por un lado tenemos a Kate, una adolescente de familia clásica de clase media, unos padres que la adoran y se preocupan por ella pero que, como millones de adolescentes que podemos encontrar, con baja autoestima ya que acaba de perder amigos por lo cambios de la adolescencia y que no encuentra el valor para arriesgarse a conocer a más personas por miedo a fracasar. Leer su paso por la universidad, sus dudas existenciales sobre su carrera y verla disfrutar de las fiestas junto con otras chicas nos hacen ver que quizás todo lo que necesitamos para dejar de sentirnos solos es simplemente arriesgarnos porque en algún momento encontraremos a esa persona genial que nos complementará y nos dará el valor de seguir adelante.

Por otro lado esta Tully, que es todo lo contrario a Kate, con una infancia difícil que la hace crecer más rápido que los demás. En apariencia es una chica popular, fuerte, segura de sí misma pero lo que oculta es que es una persona que necesita que alguien la abrace y le diga que ella puede con todo y esto lo encuentra en la amistad de Kate.

Esta amistad se hace tan grande, tan fuerte y leal que dura casi toda la vida de las protagonistas. Lo que hace Kristin Hannah con el tiempo es genial. Los detalles de las canciones, los hechos puntuales según las fechas hacen que sintamos que el tiempo pasa tan lento según las páginas que vas leyendo. Y también que formes partes de ese momento histórico y encuadres la escena para poder entender las acciones de las chicas.

Una de las cosas que más me ha gustado del libro ha sido la dos vidas tan distintas que decidieron llevar cada una de las protagonistas. Queda retratado en el libro que el éxito no solo se logra con el dinero sino de otras muchas formas. Que para ser feliz solo tenemos que hacer lo que nos gusta y con lo que estamos a gusto.

El final, como viendo siendo habitual en los libros de la autora, me dio un vuelco al corazón. Fue algo que no esperaba para nada y que además me pareció una manera genial de informas a sus miles de lectores de algo de lo que quizás no somos conscientes en nuestra vida.

En resumen, un libro perfecto para añadir a la lista de libros perfectos de Kristin Hannah. No me ha faltado nada en la historia, una redacción fluida; un recorrido histórico a través de la vida de las protagonistas y una historia muy dura que te hace apreciar lo que tienes y replantearte tus prioridades en la vida

Pero el mensaje más importante que me llego con este libro es que el amor, todas las clases de amor, si es verdadero es para toda la vida. Es un amor que traspasa fronteras, edades, tiempo, peleas, desigualdades, etc. es algo que te complementa y que te abre los ojos cuando necesitas redirigir tu vida.

Solo tengo una palabra para definir este libro y es “Maravilloso”.

Una historia que te sumerge en el más profundo invierno. Una historia sobre la perdida, el dolor y sobre todo el amor, que nos enseña la importancia de poder expresar estos sentimientos y no tener que pasar por estas situaciones solos.

Ambientada en dos épocas totalmente diferentes, Leningrado durante la Segunda Guerra Mundial y el año 2000 Estados Unidos. Un libro excepcional que nos cuenta la relación de dos hijas con su madre y además, el cuento que ella va contando a sus hijas a lo largo de la historia. Un cuento que se va convirtiendo en una realidad oculta que cambia la vida de esta familia por completo.

En este libro la autora ha retratado la situación en las que se encuentran las personas que han sobrevivido a guerras o han sufrido muchas pérdidas a lo largo de su vida. Nos muestra cómo no se ven capaces de abrir su corazón a otras personas por miedo a volver a sufrir la pérdida del pasado. Pero también, me ha llamado la atención la forma de retratar a una mujer gélida y fría con sus hijas y a su vez una mujer capaz de luchar hasta su último aliento por las personas que quiere.

Me ha fascinado la manera en la que la autora, a través del cuento, ha sabido transmitirnos todo el dolor, la lucha, la angustia de vivir las diferentes situaciones que vivieron millones de personas en esa época.

Pero lo más llamativo para mí ha sido el final. Un final donde vemos que el amor por nuestros padres es incondicional, que el amor verdadero es para siempre, que se puede amar de muchas maneras y que la relación con tu familia puede dar sentido a toda tu vida.
Me quedo con dos frases del libro que me recordarán esta historia para siempre:
– “Sigue adelante. Olvida si puedes. Vive” –
– “Ven, amor mío. Vamos al Jardín de verano…” –