Corre hasta el fin del mundo me parece una historia emocionante y cuidada. A pesar de que se me ha hecho un poco lenta y pesada en ciertas ocasiones, pues ciertas escenas me resultaban prescindibles y a veces las descripciones aportadas por el protagonista (como narrador) me resultaban excesivas. Sin embargo la historia es emocionante e intrigante.

La historia nos plantea numerosas situaciones éticas, que dan que pensar. ¿Qué haría yo si estuviera en esta situación?.

Otro punto a favor es que contamos con numerosos cambios en el tiempo, ya que contamos con escenas del pasado.

Algo que ayuda bastante a la hora de puntuar esta novela es la profundidad de los personajes. Individuos muy bien creados, con una historia personal y que llena de variedad a la novela. Es muy interesante enfrentarse a innumerables situaciones y ver cómo reacciona cada personaje. También se agradece la evolución de los mismos, la madurez frente a los cambios que suceden.

Sin embargo, el personaje principal, a pesar de que ha sido creado así a posta, me ha resultado demasiado infantil y lento, con una actitud machista y sedentaria, que hace el trascurso de la novela demasiado pesado en ocasiones.

Cabe destacar que este libro es bastante similar a obras ya existentes respecto a temática, algo que, desde mi punto de vista, resta valor a este manuscrito.

Cuando afronté esta nueva novela, comencé encontrándola muy sosa, una novela que busca simplemente el beneficio económico, a la que le faltaba argumento, esencia, interés. Encontré mucho relleno (como las interminables entrevistas de las que apenas se obtenía contenido de importancia en el transcurso de la novela).

Sin embargo, a medida que pasaba las páginas, encontraba algo más de interés. A pesar de que la mujer protagonista tiene 40 años (edad que es bastante cuestionable, teniendo en cuenta las acciones que realiza, que nos dan a pensar que estamos tratando con un personaje de apenas 30 años), empatizamos bastante con ella, debido a que la situación en la que se encuentra es bastante aplicable a cualquier persona, donde, en mi opinión, reside la atracción de la obra. Todos necesitamos buscarnos a nosotros mismos, y eso es lo que le suced a nuestra Pita.
También cabe destacar, que es poco creíble la situación que nos plantea con su padre, una relación en la que sólo el tiene la palabra, maneja su vida y se lo hace todo, teniendo en cuenta, de nuevo, que tiene 40 años, y no 30.

En muchos casos, parece que la autora está relatando su autobiografía, algo que no me termina de gustar.

Sigue sin convencerme la novela, que, a pesar de los aspectos positivos, no deja de parecerme una historia sin mucho interés, con un argumento pobre y demasiado relleno.

Para el asombro de probablemente mucha gente, este es el primer libro que leo de este autor. Y no miento si digo que no ha sido tan genial como esperaba.

Probablemente las altas expectativas que me habían creado sobre él han influido en gran medida, pero la verdad es que me ha dejado ligeramente decepcionada.
Es una obra que carece de miedo, a pesar de asegurar lo contrario, por lo que las personas sensibles pueden leerlo. No ha habido muchos momentos en los que la incertidumbre me embargara o en los que tuviese que mirar alrededor para asegurarme que seguía en el mundo real.

Por lo general, yo no suelo leer novelas de terror, y ha sido mi primer contacto con Stephen King.

A pesar de ser, por lo general, un libro entretenido, hay numerosos contras que hacen que no me quede del todo satisfecha con su lectura.

Ha sido un libro que, además de ser bastante extenso se me ha hecho un poco arduo de leer, quizás por esa sensación de monotidad antes mencionada en alguno de sus relatos.

Cabe destacar las introducciones de los relatos, que logran una mayor inmersión en la lectura y una visualización del proceso creativo.

Simplemente maravilloso.

Lo primero que me llamó la atención de este libro es su portada, de un precioso azul verdoso, una ilustración llamativa y una grata tipografía que se unen para formar un agradable inicio.

En esta novela gráfica, la autora Flavita Banana nos presenta unos microcuentos relatados con simples, gruesos y bellos trazos.

Lo que más me ha gustado, sin duda, ha sido la libertad que propone. Consigue introducirse en nuestros pensamientos para hacernos sentir identificados.

Todo un grito al feminismo y a la igualdad, combinados con una serie de escenas simples, tradicionales y veraces.

Respecto a la duración de la novela, tengo sentimientos sentimientos encontrados: Es una lectura muy fresca, dinámica y rápida, pero bastante breve.

Un libro completamente recomendado, que ha sabido hacerme desconectar y pasar un buen rato. Sin duda, es uno de mis gratos descubrimientos del mes.

Esta lectura puede ser totalmente recomendada para la época de exámenes o para, simplemente, desconectar y reirse un poco.