Esta novela mezcla varios géneros como son el thriller policíaco, la novela histórica y gótica, su lectura es entretenida e interesante donde las luces son más importantes que las sombras, se nota la buena documentación de la época. Su ritmo es bueno al inicio, aunque decae un poco, pero ciertamente te mantiene enganchado a la trama Ambientado en el Madrid del siglo XIX, podemos conocer a unos protagonistas con multitud de sentimientos que evolucionan mientras avanzamos. Gracias a las descripciones detalladas nos adentramos en la vida de la ciudad y sus costumbres.

Todo comienza con un extraño suceso, donde dos personas tan diferentes se juntan para investigarlo. Leónidas Luzón, investigador para la iglesia, y Elisa Polifeme, vidente que no entiende su don. Se dan cuenta de que ese caso les dará muchos problemas y que además se va complicando a medida que avanza la investigación.

Son los misterios, los hallazgos y los sucesos raros los que atraen a la lectura, las sociedades secretas y demás situaciones consiguen que el lector no deje de leer. Aunque los protagonistas principales no son los únicos que dan la trama a la historia, sino los secundarios, son los que hacen que el fondo sea más amplio y además consiguen que los protagonistas crezcan. Ya que aunque no tengan nada que ver entre ellos, hacen que la trama sencilla se vaya formando compleja y sorprendente.

La narración es amena, fluida y sencilla. Aunque parece largo es rápido y además te adentras en la historia. Se nota que los autores dejan un final abierto como si fuesen a crear la continuación.

En definitiva, una novela increíble la cual recomiendo.

El amor y el deseo que crece entre nuestros protagonistas es cada vez mayor, haciendo que puedan superar todos los problemas que les van sucediendo usando las armas que tienen. Por supuesto las escenas de sexo son mucho más intensas que en el primer libro, haciendo que no dejemos de ver a nuestros protagonistas deseosos. En esta segunda parte no dejamos de ver a una Sylvia fuerte y que está dispuesta a luchar contra todo y todos, pero a la vez carga con ese gran peso del que no es capaz de liberarse y que será el que no dejará de interponerse en su camino. También ese amor que ambos sienten hace que se aproximen más entre ellos y de esta manera no estarán dispuestos a separarse, por lo que lucharán porque no suceda.

En esta segunda parte vamos conociendo poco a poco a Jackson y también conocemos sus más profundos secretos, lo que para Sylvia será un infierno, pues tendrá que enfrentarse a lo que le pasó. También descubriremos el por qué pasó y demás implicaciones. Pero gracias a la ayuda de Jackson y su mejor amiga Cass conseguirá paso a paso superarlo.

En esta parte también descubrimos que hay dos personajes de importancia que son Damien y Nikki, que ya aparecieron en el primer libro pero sin tanta importancia, lo que hace es que apetezca descubrir cuál fue la historia de ambos personajes.

Refiriéndonos ya al final, la autora ha empleado un gran final para que así tengamos más ganas de la última parte. En definitiva, En mis brazos con un final impactante no permite que te desenganches de esta trilogía.