Leyendo las tres primeras lineas de la sinopsis este libro ya logra conquistarte. ¿Dos personas que comparten cama y ni siquiera se conocen? No me digáis que no queréis saber cómo llegan a esta situación tan peculiar.

Piso para dos es una novela divertida, ágil y entretenida perfecta para desconectar.

Tiffy trabaja como editora en una pequeña editorial dedicada a la publicación de libros de manualidades y bricolaje. Tan pequeña que… pese a dedicarse en cuerpo y alma a su trabajo, el salario que recibe por él no le permite poder pagar el alquiler de un piso en Londres. Hasta ahora Tiffy vivía con su novio, pero tras cortar con él necesita con urgencia encontrar un piso barato.

Leon es enfermero del turno de noche en un hospital de cuidados paliativos pero necesita más dinero. Vive solo, únicamente está en su piso por la mañana y hasta media tarde, así que… porque no compartir piso y sacar un dinero extra. Aunque no solo compartirá su piso, sino también su cama.

Dar con el anuncio de Leon resolverá los problemas de Tiffy, aunque tenga que superar la incomodidad de compartir la cama.

Ambos personajes son enternecedores, Tiffy es un persona estrafalaria y con una personalidad única. Ella es leal, alegre y sincera. Leon es taciturno y bastante introvertido pero que te conquista desde el principio.

Una de las cosas que más me ha gustado de esta historia es la forma en la que los personajes se van conociendo entre ellos. Pese a vivir juntos, no se ven, y van conociéndose el uno del otro por pequeños detalles del día a día que encuentran por el piso y por las notas que se van dejando.

El resto de personajes secundarios tampoco tienen desperdicio, algunos los amarás y a otros los amarás, pero todos aportan su parte a la historia enriqueciendo la trama.

No os cuento más sobre el libro porque merece mucho la pena ir descubriendo a los personajes y con ellos, sus historias. Os aseguro que éste será un libro que os hará reír, os enternecerá, os sorprenderá y que devoraréis. Además, teniendo en cuenta las fechas a las que nos acercamos, este es un muy buen libro para regalar en Navidad.

La verdad es que nunca me había animado a leer libros publicados por youtubers, pero vi este y me animé. Hace tiempo que sigo a María Herrejón tanto en su canal de Youtube como en sus redes sociales y cuando vi el libro me animé a tenerlo por saber un poco más sobre ella, pero… el libro ha sido bastante decepcionante.

Bajo mi punto de vista, este libro tan solo recopila muchas de las cosas que ya nos han ido contando en sus videos, pero tampoco aporta mucha más información. Cuando supo de él, me imaginaba un libro algo más personal, pero al leerlo te encuentras con un conglomerado de tags. La verdad es que no me ha gustado mucho.

En este libro vamos encontrando anécdotas de su día a día, de cómo es la convivencia con tu amigos, nos hablan de sus gustos personales… todo ello enfrentando dos personalidades tan distintas como son las de Lili y Herrejón.

Es posible que a verdaderos fans de ellas les pueda gustar el libro, pero si no las sigues es difícil que te guste. Porque, aún siguiéndolas, te puede dejar tan indiferente como a mí.

Aunque no todo va a ser malo. Me ha encantado la maquetación y diseño del libro, las ilustraciones son todas una pasada.

Anne y Marco reciben una invitación de sus vecinos para cenar, sólo hay un requisito, no pueden llevar con ellos a su bebé de seis meses. Su perfecta vecina no soporta a los niños y más concretamente el llanto de los bebés. Marco cree que les vendrá bien cambiar de aires un poco, descansar por una noche; así que, cuando la niñera les falla, convence a Anne de que su hija estará bien. Con pasar cada media hora a vigilarla y llevándose el monitor a casa de sus vecinos nada malo puede pasar.

La velada va transcurriendo y cada media hora, uno de ellos, se encarga de pasar a cuidar de su hija. Cuando deciden regresar a casa la puerta principal esta abierta, Anne se inquieta y cuando llega a la habitación de su hija todos sus temores se hacen realidad. La cuna está vacía, su bebé ha desaparecido. Así comienza la pesadilla para esta pareja que lo único que quiere es recuperar a su hija.

La novela empieza poniéndonos en tensión. Ha desaparecido un bebé, ¿quién se lo ha llevado?, ¿por qué? Este punto de partida puede atraer, y digo puede porque… ¿cómo pudieron ser tan irresponsables sus padres?, ¿a quién se le ocurre dejar en casa sólo a un bebé de seis meses? Un comienzo que a muchos les ha parecido atractivo, a mi no me ha acabado de cuadrar. No es nada lógico dejar a un bebé sólo aunque vayas a estar en la casa de al lado y pases cada media hora a verlo, ¿estamos locos? 

Omitiendo este pequeño detalle, he de decir que la trama resulta muy adictiva. No dejas de pensar en quién puede ser responsable, siempre hay alguien que te parece culpable, elaboras teorías cada dos por tres para que luego la autora te las eche por tierra. Y es que, si hay algo que destaque en este libro son los giros argumentales con los que la autora nos va a ir sorprendiendo. Y ese final, menudo final.

Los personajes, sobre todo los de los padres, que son a los que más vamos a conocer, están muy bien trabajados. Con ellos vivimos la angustia que supone perder a un hijo y la desesperación no saber dónde está. Sentiremos su culpabilidad, esa que les lleva al límite de la locura y la desconfianza que sienten, entre ellos, hacia aquellos que les rodean y en ocasiones, hacía sí mismos.

Aunque al principio no acabó de engancharme, poco a poco me fue resultando más adictivo y cuando sobrepasé la mitad, no podía dejar de leerlo. La novela tiene mucho ritmo y continuamente encuentras información que te hace replantearte tus hipótesis. Creo que puede ser un libro perfecto si lo que buscas es abstraerte.

Un puñado de amigos y dos cerezas nos cuenta la historia de Crisi. Cristina, o Crisi, como todos la llaman, es una chica de 30 años a la que le ha tocado pasar por mucho y crecerse ante las adversidades. Su vida se ha visto marcada por dos situaciones de las cuáles aún no ha podido recuperarse. De hecho, son dos de sus pesadillas recurrentes. En primer lugar, algo que le sigue afectando es la mala experiencia que vivió en su primera relación sexual con John, el irlandés y mejor amigo de su hermano mayor. Para rematarla, su socio, con el que había creado su propia empresa de antigüedades, y en la que había volcado todos sus esfuerzos, le estafa apropiándose de todos los bienes de la empresa aprovechandose de un momento de debilidad por el que estaba pasando.

Pese a todo esto, Crisi, ha conseguido salir adelante y sigue luchando por ello. Ahora trabaja de camarera para hacer frente a sus deudas. ¿Qué ha sacado de todo esto? Una fuerte personalidad, Crisi no ha perdido la sonrisa y es una mujer muy dicharachera. Le encanta utilizar el sarcasmo y se caracteriza por un humor muy peculiar. Algo que le hace muy peculiar es que no se achanta ante las adversidades, se enfrenta a ellas para que no acaben con su felicidad. Por eso, cuando sus amigos le organizan por sorpresa una escapada a la playa con sus amigos de su infancia, el hecho de tener que reencontrarse con John, al cual no ve desde hace más de 13 años, y con su impresionante novia, no conseguirán que no logre disfrutar de este viaje lleno de aventuras.

Entre los amigos de Crisi encontramos personas de todo tipo. La mayoría de ellos se conocen desde la infancia y han compartido grandes momentos juntos. Es este sentimiento de amistad el que resaltaría por encima de todo. La buena relacion que mantienen los unos con los otros y lo bien que se conocen es destacable, pese a que, con algunos de ellos, han pasado muchos años desde la última vez que se vieron. Este reencuentro le hará recordar viejas anécdotas y juntos crear otras muchas nuevas, que en futuro volveran a ser rememoradas.

Este aspecto, es el único que destacaría de todo el libro. Y es que esta historia no ha conseguido engancharme por muchos motivos. El primero de ellos ha sido su protagonista, no he logrado comprenderla en ningún momento. Crisi se supone que se ha tenido que enfrentar a problemas bastantes serios que la han hecho madurar, sin embargo, me he encontrado con una persona bastante inmadura, o es la sensación que yo he tenido.La forma en la que Crisi afronta muchas de las situaciones que le ocurren no se me correspondían con toda esa vida que ha pasado ni con una persona con una edad como la suya. Tampoco he conectado con su humor, bueno, con el humor en general de todo el libro, creo que se intentaba buscar esas carcajadas poniendo a los protagonistas en situaciones o diálogos demasiado absurdos que la mayoria de las veces no aportaban nada a la historia. Además, Crisi es una persona que divaga mucho, muchísimo, y durante la narración de lo que está ocurriendo se nos va en demasiadas ocasiones a recuerdos o pensamientos que se le pasan por la cabeza. Pero es que esas historias que se monta en su cabeza son taaaaan largas que perdía el hilo de la escena que estaba ocurriendo. En concreto, recuerdo un diálogo con John, el cual, además, considero que era bastante importante, en el que por cada frase que John decía teníamos casi media página llena con sus divagaciones. Cosas como estas hacían que la narración me resultase lenta. Y sí, me gusta que los personajes divaguen a veces, pero no tanto.

En cuanto al resto de personajes, estaban ahí, acompañaban a Crisi, pero no he visto una evolución en ellos ni tampoco he conectado con ninguno. Todos están muy definidos con unas personalidades muy peculiares pero planas. Pululan alrededor de Crisi creando situaciones absurdas o metiendo a la protagonista en otras. Los únicos que consiguieron sacarme alguna que otra sonrisa fueron los gemelos demoníacos con sus malignas ocurriencias, qué pena que aparecieran tan poco.

La trama… no ha acabado de convencerme, bajo mi punto de vista, la historia de amor que se nos plantea, apenas tiene relevancia y el giro final que nos encontramos en el libro, me resultó bastante predecible. Hacía bastante tiempo que intuía hacia donde se dirigían las andadas, con lo que no consiguó sorprenderme. Para mi, este libro ha tratado por encima de todo sobre el reencuentro de unos amigos de la infancia y el valor de la amistad.