En ocasiones como lectora no sé que necesito para que algo me encanté, hay algunos ingredientes habituales, aunque también creo que hay otros que ni yo misma conozco, con el tiempo he ido conociéndome más y diseccionando las razones por las que me gusta uno u otro libro.
Con esta lectura me ha ocurrido algo curioso, la sinopsis me encantó, misteriosa y con un toque oscuro, pero el libro me ha sorprendido todavía más, gustándome por razones que no esperaba y ¡Cuánto agradezco que me pasen estas cosas!

 La primera parte y la más fácil con la que me gana casi cualquier libro es la parte paranormal, y que haya una investigación de por medio, sobre todo disfruto cuando incluso la ambientación es más oscura de lo habitual, y esto se refleja no solo en descripciones, sino también en los propios personajes.

Pero es que si a esa ambientación algo oscurilla (tampoco en exceso), le añadimos el maravilloso trabajo que han hecho los autores al trasladarnos al Madrid de 1859, tenemos una bomba. Nos hablan de calles emblemáticas, edificios e incluso personajes de la época que en ocasiones aparecerán, incluso en ocasiones los autores se permiten hacer incisos explicando «este autor todavía no ha publicado la novela que le catapultará al éxito», sin perder hilo ni paralizando la lectura. Por todo esto, es una lectura rica de la que he aprendido cosas de mi ciudad. Sumamos además el lenguaje de los personajes, más parecido al que utilizaban en la época. Así que sí, la ambientación me ha parecido brillante, y me ha ayudado mucho a sentirme en esas calles donde por la noche un sereno anunciaba que todo estaba en calma.

Los personajes son otro punto importante, sin tópicos, sin describir su belleza y elegancia al andar. Lo que más importa de los personajes es lo que tienen en su cabecita y su corazón. Es curioso que los dos protagonistas tienen problemas físicos (ya os enteraréis cuales), lo cual me ha gustado porque primero supone una limitación en ciertas cuestiones y segundo son personajes con otras habilidades y con una inteligencia que les hace suplir esa parte física, me gusta el significado de que el cuerpo no es más que un recipiente al que cuidar pero lo que lleva dentro es lo verdaderamente valioso.

Historias paralelas y personajes secundarios que dan más vida a esta historia, que nos ayuda a entender todo el contexto de la historia y de las diferentes personas que vamos conociendo a lo largo del libro.

La trama me ha gustado y los sucesos que la acompañan también, no es un libro en el que no paren de suceder cosas, en eso puede que tenga un termino medio lo cual también me ha gustado ya que he podido degustar la historia e impregnarme bien de cada detalle, de cada calle, del lenguaje y costumbres de la época. Quedan muchos hilos para un segunda parte que estoy deseando leer, porque quiero regresar con esos protagonistas y a ese precioso Madrid,

La portada del libro me hizo pensar que podría ser una historia muy dulce, después pasé a la sinopsis que me hizo pensar que no solo sería dulce si no que además me contaría una historia seguramente preciosa de superación y lucha. En principio, creo que todo lo que he comentado era la pretensión del libro, pero por lo menos a mi no me ha llegado de ninguna de las maneras.

Nuestra protagonista Fiona cuida de un padre que tiene una extraña enfermedad, su madre murió en el mismo accidente por el cual el padre desarrolló la enfermedad. Ella lleva 4 años luchando porque nadie se enteré de su situación ya que al ser menor de edad los servicios sociales pasarían a hacerse cargo de ella. No conforme con esto, no tiene más familia, en el instituto es acosada y además se pasa el libro entero lamentándose por su sobrepeso (es cansino, si).

Los personajes me han parecido completamente planos, me daba lo mismo que sufrieran o no porque no empaticé un solo segundo. La historia en sí, tampoco me ha gustado, me ha parecido todo muy preparado, una vida muy triste en la que todo es malo, y que parece que no hay manera de solucionar y luego de repente todo es genial. El tema del sobrepeso me ha aburrido, está muy bien que quiera adelgazar por salud y tal, pero es que en cada capítulo se queja de su peso, sumado al resto de quejas sobre su triste vida.

Si puedo decir que la pluma de la autora es agradable, lo malo son los personajes y la historia en sí mismos.

Me cuesta mucho hacer reseñas negativas, porque no quiero herir sentimientos, pero está es simplemente mi opinión, a otras muchas personas puede ser que este libro les gusté y les llegué.

Uno de esos libros que no me emocionan

Disfruto mucho con las historias de fantasía y reinos lejanos, de otras épocas u otros mundos, por lo que me atrajo desde el principio esta historia que parecía bastante original.

Kelsea Glynn es la heredera del trono de Tearling, su madre fallecida la envío a vivir con unos campesinos en el bosque con el fin de protegerla. Cuando cumple la mayoría de edad la guardia real va a buscarla para llevarla al castillo real y convertirla en reina. Su camino estará lleno de peligros, por un lado su tío – el regente – ha contratado a unos asesinos, la Reina Roja que gobierna sobre el prospero reino vecino y que años atrás atacó al Tearling con la mayor crueldad es uno de los mayores peligros, pues también lleva años buscando a la heredera del Tearling.

Kelsea es un personaje curioso, la autora la describe como fea, rellenita, algo insegura a veces, pero también capaz de una valentía envidiable. No mucha gente saldría de una cabaña en el bosque para enfrentarse a un reino corrupto que tendrá que cambiar de principio a fin.

Nuestra protagonista y heredera al trono, tendrá que ganarse a una guardia real que desconfía de sus habilidades y a un reino que solo la ve como a un niña con una corona. Tendrá que demostrar que tipo de reina va a ser, pero eso no será nada fácil. Realizar cambios y convertir el Tearling en una sociedad más justa implica unos riesgos enormes, contra los que tendrá que luchar.

El ritmo de La reina del Tearling es bastante pausado, a mi en ningún momento me ha aburrido. Se presenta un sistema de reinos, magia y organizaciones completamente nuevo, que además ha sido muy interesante conocer. Es una historia en la se reflejan muchas injusticias, conocemos como los nobles y la iglesia tienen una serie de privilegios extravagantes, que el pueblo no tiene.

Es un libro que guarda mucho misterio, quien fue el padre de Kelsea, como era su madre -la antigua reina-, que ocurrió con la invasión de la Reina Roja y mil preguntas más que nadie quiere responder a la joven reina. Todos estos son temas que provocan tensión y dudas en el lector, algunas de esas preguntas se responden levemente, pero la mayoría quedan en secreto esperando a los próximos libros de la saga.

Hay personajes maravillosos, también envueltos en el misterio. El Traedor, un ladrón y asesino con mucho carisma y secretos. Es capaz de entrar en cualquier mansión o castillo, sin importar la seguridad que encuentre. Tiene pinta de que será un personaje que de mucho juego.

Maza el jefe de la guardia real, es también un personaje estupendo, cabezota y leal hasta las trancas. Con mucha personalidad y con pocas ganas de hablar de la antigua reina.

He disfrutado mucho viendo como Kelsea tiene que enfrentarse a tantas cosas, las injusticias de su reino, demostrar todo lo que ella puede ser como reina a tanta gente, incluso a ella misma, a pesar de que ella estaría más cómoda leyendo un libro en un mullido sillón.

Lo he puntuado con un 3’5 en Goodreads, me ha gustado mucho, pero no ha logrado removerme por dentro como para ponerle el 4. Para mi este libro muestra el potencial de los siguientes libros de la saga, la autora nos enseña las cartas que se van a manejar, creo que puede convertirse en una saga maravillosa por todo lo que puede dar de sí esta historia.

Una saga de fantasía que nos muestra su potencial, con una protagonista diferente y luchadora.

Me animé a leer Traicionada porque parecía uno de esos thrillers románticos que tanto me gustan y me hacen disfrutar de lo lindo. Pero no, mis expectativas pronto fueron bajando, os cuento que me ha parecido esta lectura.

Por un lado, hay partes de la escritura que me gustaban. La narración en general y la presentación del trabajo y las funciones que realiza la protagonista – directora de cine – me gustaron. Pero en la manera de escribir también había algo raro, chocante que no me dejaba terminar de disfrutar. Lo que menos me ha gustado es que la autora repite muchísimo ciertas ideas que parece que quiere que nos queden bien claras, como lo maravilloso que es el novio de la protagonista, lo maravillosamente despistada que es ella, y lo maravillosa que es su ayudante que hace todo por ella para que no se estrese ni un poco. Acababa un párrafo, y en el siguiente me volvían a contar más o menos lo mismo. En ocasiones, algunos de los diálogos eran infantiles, otras veces se ventilaban conversaciones importantes con dos simples comentarios.

Y ahora pasemos al tema más importante, la historia. Simple, de película de Antena 3 de los domingos por la tarde, así que ese thriller romántico que esperaba encontrar se fue por la ventana dejándome con este libro. No voy a negar que me enganchó, de aquella manera, como las telenovelas o esas pelis malas. Quería saber el final aunque la lectura fuera cercana a lo desagradable en algunos ratos.

No es un libro que recomiende en absoluto, lleno de clichés, diálogos muy poco trabajados, personajes planos y una historia simplisima y mal llevada.

Llevo mucho tiempo queriendo leer más libros ambientados en la Segunda Guerra Mundial, pero nunca me pongo con ello, cuando vi este libro en Edición Anticipada no dudé en pedirlo al leer la sinopsis y esa ambientación en mitad de la guerra.

Dile a Marie que la quiero, es un libro con muchos personajes, todos dañados antes de la guerra y durante la misma. Personas y vidas muy diferentes se unen en este libro para buscar a la pequeña Marie. En un momento u otro, deciden ayudar a esa pequeña a las que buscan sus padres.

Los padres de Marie se conocieron antes de que el régimen nazi llegara al poder, se reían de los exaltados que apoyaban el antisemitismo, hasta que poco a poco la sociedad cambió. Los judíos dejaron de ser bienvenidos, toda su vida da un vuelco, ya ni pueden trabajar, hasta que finalmente los judíos son apresados y tratados como si fueran ratas. Es desgarrador como el autor va narrando desde el punto de vista de los padres de Marie ,como va cambiando la sociedad alemana, como su vida sencilla y normal da una vuelta brutal, hasta que terminan huyendo de Berlín.

Todos los personajes tienen historias inspiradoras. Un amor roto, una madre que perdió a su hijo en la guerra, una profesora que no pudo tener hijos, un cartero solitario,… Todos ellos intentarán ayudar a Marie o a sus padres, además de ser determinantes en el desarrollo de la historia.

Dile a Marie que la quiero es una historia con la dosis de acción adecuada, que te deja con las emociones a flor de piel,… es duro imaginar los campos de concentración y el horror del nazismo.

La trama va enredándose poco a poco, seguimos tanto a Marie, sus padres y el resto de personajes, en ocasiones el propio lector no sabe donde está la pequeña, lo que genera mucha tensión. También tenemos persecuciones muy emocionantes, consiguieron agobiarme.

La forma de escribir del autor me ha parecido una maravilla, sabe donde poner emoción, donde un poco de acción, sabe jugar con los ingredientes, por eso la historia termina siendo tan redonda y bien pulida. Además, de que facilita que el lector se imagine las triste ciudades francesas conquistadas, los edificios destrozados por los bombardeos, los personajes que cambian según la guerra y otros sucesos que les van empujando.

Al cerrar el libro sentí que había leído una historia con muchas dentro, todas preciosas y valiosas. Es lo que tiene que los personajes estén tan trabajados.

Es una lectura muy recomendable, con la he disfrutado muchísimo.